Elizabeth Taylor ingresa en hospital
| Viernes 01 agosto, 2008
Elizabeth Taylor ingresa en hospital
La actriz fue internada por precaución en un centro médico de Estados Unidos
Los Angeles
EFE
La actriz Elizabeth Taylor ingresó ayer, por “precaución”, en un hospital estadounidense, pero se encuentra bien y volverá pronto a su casa, informó su representante, Dick Guttman.
El publicista de la ganadora de dos Oscar por “Una mujer marcada” (1960) y “Quién teme a Virginia Woolf” (1966), no reveló en cuál hospital ingresó Taylor ni por qué motivos; solo dijo, en un breve comunicado, que la actriz, de 76 años, se encuentra bien.
“Su visita al hospital fue por precaución y va a volver pronto a su casa. En estos momentos está acompañada por familiares, amigos y fabulosas joyas”, señaló con un toque de humor Guttman.
Taylor ha sufrido varios problemas de salud en los últimos años, incluido un paro cardiaco en 2004, fracturas de la espina dorsal, y los efectos de una escoliosis la dejaron casi postrada en la cama y en 1997 la operaron de un tumor cerebral maligno.
También tuvo úlceras, bronquitis aguda, bursitis, disentería, dos serias neumonías y un problema de adicción a drogas y alcohol.
La actriz fue internada por precaución en un centro médico de Estados Unidos
Los Angeles
EFE
La actriz Elizabeth Taylor ingresó ayer, por “precaución”, en un hospital estadounidense, pero se encuentra bien y volverá pronto a su casa, informó su representante, Dick Guttman.
El publicista de la ganadora de dos Oscar por “Una mujer marcada” (1960) y “Quién teme a Virginia Woolf” (1966), no reveló en cuál hospital ingresó Taylor ni por qué motivos; solo dijo, en un breve comunicado, que la actriz, de 76 años, se encuentra bien.
“Su visita al hospital fue por precaución y va a volver pronto a su casa. En estos momentos está acompañada por familiares, amigos y fabulosas joyas”, señaló con un toque de humor Guttman.
Taylor ha sufrido varios problemas de salud en los últimos años, incluido un paro cardiaco en 2004, fracturas de la espina dorsal, y los efectos de una escoliosis la dejaron casi postrada en la cama y en 1997 la operaron de un tumor cerebral maligno.
También tuvo úlceras, bronquitis aguda, bursitis, disentería, dos serias neumonías y un problema de adicción a drogas y alcohol.