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Viernes, 26 de julio de 2024



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Eli Feinzaig: Impuestos a las zonas francas matarían la gallina de los huevos de oro

El gobierno debería estar resolviendo temas que afectan al sector productivo como el tipo de cambio del dólar y la tasa de política monetaria y no sugiriendo tributos.

Esteban Arrieta earrieta@larepublica.net | Miércoles 24 enero, 2024 02:00 p. m.


Eli Feinzaig, jefe de fracción del Partido Liberal Progresista. Archivo/La República.
Eli Feinzaig, jefe de fracción del Partido Liberal Progresista. Archivo/La República.


Eliminar las exoneraciones que disfrutan las zonas francas sería como "matar la gallina de los huevos de oro", según Eli Feinzaig, jefe de fracción del Partido Liberal Progresista.

El solo hecho de hablar de este tema es irresponsable, ya que podría afectar la nueva inversión que se está convenciendo para que venga al país, a la vez que complican los planes de inversión que podrían hacer las empresas que ya están en el país.

Lea más: Otto Guevara: Solo hablar de impuestos a las zonas francas limita el flujo de nueva inversión y ampliaciones

Para Feinzaig, el gobierno debería estar resolviendo temas que afectan al sector productivo como el tipo de cambio del dólar y la tasa de política monetaria y no sugiriendo tributos.

¿Cree usted que el país debe revisar las exoneraciones vigentes?

No las que están relacionadas con las zonas francas.

Es irresponsable estar hablando tan alegremente de matar la gallina de los huevos de oro, como lo anda haciendo el Ministro de Hacienda, por más que diga que lo malinterpretaron.

Por otra parte, las miles de exoneraciones que no están fundamentadas en la promoción de la actividad económica o para beneficiar a las poblaciones más necesitadas (por ejemplo, equipo para personas con discapacidad), deben ser revisadas y eliminadas.

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¿Qué opina de esta sugerencia?

La política económica de este gobierno tiene en apuros a buena parte del sector productivo nacional; pareciera que ahora también quieren poner en jaque a la inversión extranjera directa.

Lo más preocupante de este discurso del gobierno es que ni siquiera presentan una alternativa.

Si alguien quiere dar al traste con el modelo de desarrollo adoptado por el país hace cuatro décadas, lo mínimo que uno esperaría es que planteen una nueva visión y le expliquen al país hacia dónde lo quieren llevar.

Que le expliquen a las decenas de miles de costarricenses que hoy gozan de empleos bien remunerados en zonas francas, lo que podrán hacer una vez que dichas empresas abandonen el país por el doble problema del crecimiento acelerado de los costos de producción generado por la política monetaria y cambiaria, y la inseguridad jurídica generada por tan irresponsables declaraciones de los más altos cargos del equipo económico del gobierno.

¿Cuál sería el impacto?

Es importante señalar que el impacto no se va a esperar a que el país tome la decisión suicida de gravar con impuestos o eliminar las exoneraciones (que viene siendo lo mismo) de las empresas en el régimen de zona franca. El solo hecho de estar sacando el tema a discusión cada cierto tiempo disuade a nuevos inversionistas de traer sus negocios al país o a las empresas ya instaladas en Costa Rica de reinvertir aquí.

Y si se llegaran a aprobar los impuestos para las zonas francas, podemos esperar la pérdida de cientos de empresas y de miles de empleos bien pagados.


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