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"Costa Rica debe proteger su bienestar"

Silvia Pardo spardo@larepublica.net | Martes 25 enero, 2011




Creador del Indice Planeta Feliz, Nic Marks, vino al país y cree en su desarrollo
“Costa Rica debe proteger su bienestar”
Preservar la identidad, cuidar el ambiente y establecer empleos creativos deben ser políticas del gobierno

Costa Rica es el país más feliz y verde del mundo en el último Indice Planeta Feliz, que califica el nivel de bienestar de las naciones tomando en cuenta su impacto en el ambiente y la felicidad de sus ciudadanos.
Con una calificación de 76,1 encabeza el ranking por tener la más alta satisfacción con su vida, una alta expectativa de vida y un impacto pequeño en el ambiente.
Nic Marks, fundador del Centro para el bienestar New Economic Foundation y autor del índice, está en el país para impartir mañana la conferencia “¿Un planeta feliz? Cómo los gobiernos, empresas y la gente pueden nutrir el bienestar y respeto por la naturaleza”, organizada por la Universidad para la Paz.
“Las grandes economías alrededor del mundo no están creando felicidad, más bien generan problemas sociales y dañan el ambiente. No podemos considerar todo crecimiento como algo bueno”, dijo Marks.
En una conversación con LA REPUBLICA, Marks dio un esbozo de sus pensamientos sobre el país más feliz del mundo.

¿Costa Rica se mantendrá como el país más feliz?

Costa Rica tiene segmentos de la población que no son tan felices como otros. Lo que debe asegurar es no perder esos elementos que generan bienestar, porque ustedes tienen algo muy bueno. El Banco Mundial o cualquier otra institución puede decirles cuál debe ser su nivel de desarrollo, pero debe priorizar la protección de su sociedad en un sentido comunitario, así como defender el desarrollo en cuanto al medio ambiente.

¿Es Costa Rica un ejemplo a seguir?

Si queremos que exista el planeta dentro de un par de décadas no podemos incentivar que todo el mundo viva como Estados Unidos; en eso creo que Costa Rica es un buen ejemplo. Los costarricenses tienen vidas bastante buenas y no le cuestan tanto al planeta. Mi pregunta es ¿cómo puede el resto del mundo aprender de Costa Rica? Costa Rica es de muchas formas el emblema del Indice de Planeta Feliz, y con todo el respeto del mundo, ustedes tienen muchos retos que afrontar, pero viniendo de un europeo, la vida en Costa Rica es excelente. Algo están haciendo bien. Aun así, hay muchas cosas que deben mejorar.

¿Qué políticas debe cambiar el gobierno costarricense?

Debe dejar de crear trabajos solo para reducir el desempleo e implementar un mercado laboral que permita a las personas desarrollarse. Esto ocurrirá cuando las políticas gubernamentales permitan que este tipo de personas emerjan y florezcan. Cuando las escuelas dejen de producir exámenes y graduados, y que de ellas salgan seres humanos. Costa Rica debe pensar si su política para crear empleos es atraer call centers norteamericanos de aseguradoras que no resulten gratificantes para el empleado, o si es crear centros tecnológicos donde los empleados puedan ser creativos y tengan la oportunidad de crecer.
Esto es crítico para alcanzar el bienestar: crear empleos que la gente disfrute. No empleos que sirvan para pagar las cuentas. Costa Rica debe dejar de pensar de una manera encasillada. Ustedes tienen algo muy bueno, no lo pierdan por presiones del mundo de cómo y cuánto deben crecer económicamente. Protejan lo que tienen y planeen un camino hacia el desarrollo que sea sensato.

¿Cómo afecta el sector empresarial?

El propósito de los negocios no debe ser enriquecerse y sobrevivir. La meta debe ser crear productos y servicios que mejoren la calidad de vida. Si no interesa mejorar la vida de las personas con sus productos, ¿para qué tener un negocio?
En cuanto a lo interno, creo que se debe invertir en el bienestar de los colaboradores. Ahí es donde está el valor de una empresa. Esto es crítico en el sector servicios, que la gente disfrute de su trabajo para que los clientes busquen ese servicio. Las empresas deben también cuestionarse el impacto que dejan sus actividades en el planeta y buscar formas de minimizarlo.

Hay quienes critican que el bienestar es subjetivo y no se puede medir. ¿Es su visión utópica?

No. Conozco muy bien las técnicas de cómo medir el bienestar, y hay problemas que debemos resolver. Eso solo pasará con mayor inversión, mayor cooperación para recolectar información y trabajo conjunto entre académicos y gobiernos. La crítica de que el gobierno no debe meterse en el bienestar de las personas me parece ingenua. Los gobiernos afectan nuestras vidas, como lo hacen la publicidad y miles de otras industrias que afectan nuestro entorno. Deben pensar en el bienestar de las personas.

Silvia Pardo
spardo@larepublica.net






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