Alexander Gerber, gerente de Palma Real: “No es momento de entrar en pánico”

Pandemia y desaceleración económica son una mala combinación para el turismo

Jeffry Garza jeffrygarza.asesor@larepublica.net | Viernes 20 marzo, 2020

Un señor calvo sonríe en el lobby de un hotel — Esteban Monge/La República

La pandemia del coronavirus está aquí y tardará un rato en irse, por lo que el pánico no es la mejor opción para hacer frente a la enfermedad que tiene en jaque los negocios en todo el mundo.

“Eventualmente, tendremos que aprender a vivir con ella”, dijo Alexander Gerber, quien dirige uno de los hoteles más importantes de San José, el Palma Real.

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En esta opción de hospedaje se extremaron las medidas sanitarias, como el uso de guantes estériles y la desinfección de los espacios comunes cada cinco minutos.

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Gerber conversó para la revista DESTINOS sobre este tema y otros retos que enfrenta el sector como la desaceleración económica y la futura regulación de AirBnb.

¿Cómo afectará el coronavirus a la industria hotelera nacional?

No es momento de entrar en pánico. Hay que tomar con seriedad las recomendaciones del Ministerio de Salud y esperar la evolución del virus.

Por ahora, lo mejor que podemos hacer es tener el hotel más limpio. En nuestro caso, se estará desinfectando todo cada cinco minutos y el personal de limpieza usará guantes estériles.

Evidentemente afectará la visitación este mes, ya hay eventos cancelados, la gente no va a querer salir de sus casas, pero esperamos que el efecto no se prolongue por mucho tiempo.

¿Deben los hoteles ser más flexibles con sus políticas de cancelaciones debido a esta pandemia?

Sí, hay que tener más flexibilidad, el virus ya está aquí y no se puede hacer mucho.

Nosotros suspendimos nuestra tarifa no reembolsable y en el caso de la tarifa flexible el cliente puede cancelar 24 horas antes sin ningún problema y sin temor de que se le cobre algo adicional.

¿Sufrirán más por esto los hoteles céntricos que los de playa?

Sí porque hay más eventos en lugares cerrados, pero no solo los hoteles de San José debemos preocuparnos.

El turista extranjero visita tanto San José como las playas en su plan de viaje; puede que el coronavirus lo aleje totalmente de ambos destinos.

Todo depende de la imagen que dé Costa Rica al exterior en el manejo del coronavirus, para que sigan viniendo.

De tener un caso confirmado, ¿cómo deberán manejarlo los hoteles?

Al huésped debe aislársele en el hotel, informar a las autoridades de Salud y darle acompañamiento hasta que pueda trasladarse al hospital o su casa.

Es crítico que el personal, especialmente el de limpieza, siga los protocolos del Ministerio de Salud.

¿Cree que se pueda dar una crisis en el sector, considerando que la economía costarricense tampoco pasa por su mejor momento?

No lo sé, es difícil de predecir. Ahorita hay incertidumbre y no es mucho lo que se pueda hacer.

Hay que tranquilizar a la gente, que sepa que los hoteles han hecho todo para minimizar el contagio.

Todo pasa por la confianza del consumidor, cuando el aislamiento pase, esto se recupera y también se recupera la economía.

¿Esta crisis podría provocar una caída de precios en las habitaciones?

Creo que las grandes cadenas sí podrían darse ese lujo, porque tienen muchas habitaciones y tendrán que buscar cómo llenarlas ante la caída en la ocupación.

En el caso de los pequeños, no creo que por el momento sea lo más conveniente.

¿La regulación de AirBnb en Costa Rica puede ayudar en este momento difícil?

Definitivamente, porque pone reglas iguales para todos y eso genera más confianza para el sector y una preocupación menos.

Espero que pronto se incorpore para que podamos ofrecer un mejor servicio a quienes nos visitan.