Serena a cazar a Graff

Federer arranca el US Open sin pensar en el título

Serena Williams inicia su recorrido en el US Open enfrentando a la rusa Vitalia Diatchenko; si gana podría seguir Mirjana Lucic y en tercera ronda Sloane Stephens o Coco Vandeweghe. Más adelante, en octavos podría verse con Agnieszka Radwanska y Madison Keys, ambas semifinalistas este año en Grand Slam.
Un camino largo con una meta fija: empatar dos marcas de la señora de André Agassi, doña Steffi Graf. Se trata de ganar los cuatro “Grandes” en una misma temporada, conquista de la alemana en 1988 y además sumar 22 títulos de Major.
"Nunca pensé que estaría en esta posición, tratando de alcanzar a Steffi o persiguiendo a Margaret", remarcó Serena, en relación a los 24 títulos de Court.
"Siempre siento que hay otro récord, que habrá otra persona o marca por pasar", agregó. "He visto mensajes de Steffi y es un gran apoyo. Me encanta ver que un campeón se pone feliz por la siguiente. Agassi también ha sido un apoyo increíble", siguió.
“No puedo sentarme aquí y decir que he sido la más grande de todos los tiempos. Lo que puedo decir es que he sido la mejor que yo podía ser. Todo cambia generación a generación, así que no creo que sea bueno comparar. Siempre miro a gente como Zina Garrison o Althea Gibson y las barreras que tuvieron que romper. Ellas han ayudado a que baje la presión en mí y poder jugar con más libertad".
Otro grande, pero del lado masculino también habló en los previos del último Grand Slam de temporada, que arranca hoy en los rectángulos de Flushing Meadow en Queen´s.
Es que el sorteo le trajo un claro recuerdo a Roger Federer: el suizo no olvida cómo pudo salvar cinco puntos de partido ante Leonardo Mayer en el Masters 1000 de Shanghái hace dos años, recuerdo que renace siendo el argentino su primer rival en el Abierto de los Estados Unidos.
"No sabía que (Mayer) no partía como cabeza de serie. Es un impacto para mí ver que voy a jugar contra él, porque en otros grandes ha sido cabeza de serie. Es un duro comienzo", comentó el helvético. "El partido de Shanghái ha sido uno de los más afortunados que he disputado en mi carrera", continuó.
Será un partido muy físico, con muchos intercambios. El es un desafío. Espero jugar con confianza y usar mi experiencia contra un jugador como él".
Federer parte como el segundo favorito de un torneo que marcará el 64º Grand Slam que dispute. Además, llega a Nueva York con la confianza que implica ganar el Masters 1000 de Cincinnati. Pero Federer también recuerda, que aunque ha ganado en Nueva York cinco veces, la última fue hace siete años. "Mi concentración no está en ganar el torneo. Eso está lejos de mi cabeza. No he estado en la final desde hace tiempo, he estado cerca, pero cerca no es suficiente".

Gaetano Pandolfo
gpandolfo@larepublica.net y agencias