Rajoy pagaría precio político por brote de ébola en España
Bloomberg | Jueves 09 octubre, 2014
Rajoy pagaría precio político por brote de ébola en España
Mariano Rajoy, primer ministro español puede agregar el virus del ébola a la lista de desafíos que se acumulan sobre su escritorio.
La Comisión Europea instó a España a explicar el primer caso conocido de ébola contraído fuera de África, mientras en Madrid los funcionarios se apresuraban a rastrear a quienes habían tenido contacto con una enfermera que presentó síntomas durante casi una semana antes de que se la pusiera en cuarentena.
Un sindicato de médicos ha exigido la renuncia de Ana Mato, ministra de Salud, como consecuencia del caso.
“Esto tendrá impacto en términos de revelar su incompetencia y falta de transparencia”, dijo haciendo referencia al gobierno Alejandro Quiroga, profesor de la Universidad de Newcastle, en el noreste de Inglaterra, que estudia el impacto de la privatización de la salud en España. “Todo es un caos”.
Rajoy ya tenía problemas para convertir en capital político los avances económicos que ha hecho España desde que salió de la recesión el año pasado, en momentos en que los votantes se sienten agotados como consecuencia de un desempleo récord, acusaciones de corrupción política y los mayores recortes presupuestarios en una generación.
Hasta el avance de la economía, impulsada por los ingresos récord del turismo, enfrenta obstáculos conforme se acercan las elecciones de 2015 y el crecimiento alemán vacila.
“Para un país turístico no es bueno estar en las primeras páginas de los medios internacionales”, dijo en Twitter José Carlos Diez, un economista independiente que ha ensañado en la escuela de negocios Icade en Madrid y en la Universidad de Alcalá. “Esperemos que se controle el brote de ébola”. Desafío catalán
Desde que volvió luego del receso estival, Rajoy enfrenta el desafío de líderes catalanes empeñados en realizar un referéndum sobre la independencia, mientras que el ministro de Justicia, Alverto Ruiz-Gallardón, renunció luego de que el gobierno abandonara su intento de elevar las restricciones al aborto.
La medida estaba destinada a calmar a los votantes fieles al partido, que ya estaban irritados ante los aumentos de impuestos que rompieron las promesas que había hecho Rajoy antes de resultar electo en 2011.
Bloomberg