Movilidad sostenible: la pirámide invertida

El primer webinar de la Feria Virtual 50stenible se llevó a cabo esta mañana y su tema fue cómo transportarse de manera más ecológica.

En el evento participaron Ana Eugenia Ureña, líder de Proyecto “Mi Transporte”, de GIZ, y Diana Rivera, directora de la Asociación Costarricense de Movilidad Eléctrica (Asomove).

En el espacio se propuso un giro de 180°, un reordenamiento inverso de las prioridades y poner la pirámide del transporte “patas arriba”: esa es la aspiración que persiguen quienes apuestan a una movilidad sostenible, tanto aquellos quienes apoyan el desarrollo de las políticas públicas en este sentido, como quienes representan a la sociedad civil en búsqueda de nuevas alternativas de transporte más ecológicas.

Dicho cambio consiste en detener el protagonismo del vehículo privado de combustión y su infraestructura asociada; para pasar a una visión de infraestructura de movilidad en la que los peatones y los vehículos de movilidad autónoma, como las bicicletas, comiencen a tener el protagonismo que los “tiempos de cambio” exigen.

En esta cascada de opciones de movilidad, otras alternativas de transporte que requieren adquirir mayor relevancia, que incluyen el transporte público, idealmente eléctrico y los vehículos de movilidad asistida eléctrica que apuntan a una fuerte reducción de las emisiones de carbono y consumo de combustible fósil que actualmente sufrimos.

Para darle vuelta al paradigma de la movilidad centrada en el automóvil privado, lo primero que hay que hacer es dejar de decir 'esto no se puede', porque se está viendo que es posible y un caso como el de la pandemia del Covid-19, que dejó ver que las personas pueden asistir a modalidades activas de transporte como caminar o andar en bicicleta para desplazarse a diferentes puntos geográficos, explicó Ureña.

En el país se están observando cambios pequeños, pero constantes, como el aumento de ciclovías y usuarios de las ciclovías.

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“Tenemos que comprometernos, ponerle ganas, pero vamos avanzando. No hay duda de que la bicicleta está subiendo su lugar de preferencia en la pirámide de transporte”, señaló la experta de GIZ.

En este último sentido Ureña señaló que en la actualidad se prevé que incluso las empresas disminuyan sus espacios físicos de oficinas e incrementen el teletrabajo, mientras que las inversiones de los gobiernos deberán reajustarse para pasar de la creación de autopistas a buscar soluciones más integrales para el transporte que faciliten la movilidad activa.

“Se requiere repensar las ciudades y todas las inversiones en infraestructura”, finalizó.

Por su parte, Diana Rivera de Asomove, su organización, que representa una parte del sentir cotidiano no se centra en promover la adquisición de vehículos eléctricos, sino en procurar la infraestructura necesaria para que la movilidad eléctrica sea posible.

“Somos 250 ciudadanos, gente real con necesidad de transportarse reales”, apuntó.

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Rivera recordó que hace solo tres años, en el 2017, unas pocas personas se habían aventurado a adquirir un vehículo eléctrico frente a una evidente necesidad de infraestructura para recarga, sin embargo, se ha visto un avance en este tema e incluso se han identificado paulatinamente oportunidades de negocio a raíz del incentivo a la movilidad eléctrica. Desde entonces han bajado los precios de la industria y ha aumentado mucho la oferta disponible.

Estos cambios van aparejados de ajustes a nivel global, por ejemplo, Rivera señaló una investigación reciente del Electric Vehicle Outlook 2019, de BNEF, muestra que los vehículos eléctricos conformarán el 57% de las ventas globales de autos de pasajeros para 2040, un poco más que el pronóstico de hace un año, mientras que los autobuses eléctricos mantendrán el 81% de las ventas de autobuses municipales para la misma fecha.

Justamente, en el marco de la movilidad de grandes camiones y vehículos de transporte, Asomove ha ido trabajando y señalando la necesidad de incentivar la compra de este tipo de vehículos para que la flota vehicular del país vaya evolucionando a transportes más limpios y ecológicos que no solo reduzcan la factura de hidrocarburos, sino que reduzcan las emisiones y bajen los niveles de contaminación de ruido y aire.

Si desea ver el webinar completo, visite el siguiente enlace.

Colaboró con la elaboración de este artículo Karla Chaves, directora de Próxima Comunicación y el programa ecoins