Licor seduce a futbolistas
Luis Fernado Rojas lrojas@larepublica.net | Jueves 17 mayo, 2012
Licor seduce a futbolistas
Psicóloga del IAFA dice que los clubes deberían tener cero tolerancia y más monitoreo sobre su principal activo, los jugadores
De ser una estrella a un futbolista estrellado, solo hay unas cuántas copas de por medio. El licor sigue haciendo de las suyas en el fútbol nacional y el no poder controlar su ingesta sigue metiendo en problemas a los jugadores de esta disciplina siendo el último caso el de José Andrés Salvatierra.
Este jugador alajuelense tuvo ayer un accidente de tránsito en aparente estado de ebriedad pocas horas antes de tener que presentarse a la concentración de la Selección Nacional que dirige Jorge Luis Pinto.
Ahora el caso es investigado por la Fedefútbol mientras que el seleccionador Pinto esperará información para referirse al asunto, pero, ¿es esto acaso algo nuevo en el fútbol?: Garrincha, George Best, Paul Gascoigne, Ronaldinho y Sócrates son solo algunos de los futbolistas mundialmente conocidos que han tenido problemas con el licor y en Costa Rica también sobran los ejemplos. La pregunta es qué hacer para evitar o por lo menos controlar este mal.
Ana Margarita Odio Castillo, máster en salud pública y psicóloga del Instituto de Alcoholismo y Farmacodependencia (IAFA), considera que hace falta una política de cero tolerancia, disciplina y monitoreo por parte de los clubes para salvaguardar su principal activo, que son los jugadores. Ella considera que hay señales como la deshidratación, fatiga y falta de concentración, entre otras que pueden ser indicadores del abuso del alcohol por parte de un deportista.
“Los clubes deben tener normativas claras sobre la conducta de sus jugadores dentro y fuera del equipo, durante el trabajo y en su tiempo libre, incluidas sus vacaciones. Se trata de profesionales que representan una inversión del club y lo ideal es que tuviesen una buena calidad de vida y un comportamiento acorde con su papel como figura pública”.
Odio dijo que el IAFA tiene un programa que se llama “Canchas libres de alcohol, tabaco y drogas” y que hace muchos años se trabajó con los equipos Santos de Guápiles y Carmelita, pero que aunque está disponible actualmente ningún club lo está aplicando.
“Para estos equipos es fundamental introducir este tema sobre todo a nivel de ligas menores, para que los chicos conozcan los peligros que pueden enfrentar luego, cuando les llegue la fama, tal vez sin estar psicológicamente preparados para ella”.
Odio comentó además que en estos casos no hay que destrozar al jugador y perjudicar su carrera como futbolista, sino más bien revisar los procesos y buscar la mejor forma de ejercer controles porque el alcohol “es algo que muchos futbolistas prueban pero no abusan; sin embargo, otros se quedan enganchados en un punto del que hay veces no hay regreso”.
Para el famoso Sócrates fue así, falleció el 4 de diciembre de año 2011 a los 57 años de edad. El Doctor, como le decían (era médico de profesión) reconoció públicamente haber tenido problemas con el alcohol, especialmente durante su época de jugador, y murió por presentar una cirrosis hepática bastante avanzada, la que confluyó con otros males y le originó una septicemia fulminante. Garrincha murió en 1983 a causa de una cirrosis ocasionada por la ingesta descontrolada de alcohol y el irlandés Best, icono del Manchester United y también alcohólico, falleció en 2005 como consecuencia de problemas renales y pulmonares, tras recibir un trasplante de hígado en 2002.
Luis Rojas
lrojas@larepublica.net
Psicóloga del IAFA dice que los clubes deberían tener cero tolerancia y más monitoreo sobre su principal activo, los jugadores
De ser una estrella a un futbolista estrellado, solo hay unas cuántas copas de por medio. El licor sigue haciendo de las suyas en el fútbol nacional y el no poder controlar su ingesta sigue metiendo en problemas a los jugadores de esta disciplina siendo el último caso el de José Andrés Salvatierra.
Este jugador alajuelense tuvo ayer un accidente de tránsito en aparente estado de ebriedad pocas horas antes de tener que presentarse a la concentración de la Selección Nacional que dirige Jorge Luis Pinto.
Ahora el caso es investigado por la Fedefútbol mientras que el seleccionador Pinto esperará información para referirse al asunto, pero, ¿es esto acaso algo nuevo en el fútbol?: Garrincha, George Best, Paul Gascoigne, Ronaldinho y Sócrates son solo algunos de los futbolistas mundialmente conocidos que han tenido problemas con el licor y en Costa Rica también sobran los ejemplos. La pregunta es qué hacer para evitar o por lo menos controlar este mal.
Ana Margarita Odio Castillo, máster en salud pública y psicóloga del Instituto de Alcoholismo y Farmacodependencia (IAFA), considera que hace falta una política de cero tolerancia, disciplina y monitoreo por parte de los clubes para salvaguardar su principal activo, que son los jugadores. Ella considera que hay señales como la deshidratación, fatiga y falta de concentración, entre otras que pueden ser indicadores del abuso del alcohol por parte de un deportista.
“Los clubes deben tener normativas claras sobre la conducta de sus jugadores dentro y fuera del equipo, durante el trabajo y en su tiempo libre, incluidas sus vacaciones. Se trata de profesionales que representan una inversión del club y lo ideal es que tuviesen una buena calidad de vida y un comportamiento acorde con su papel como figura pública”.
Odio dijo que el IAFA tiene un programa que se llama “Canchas libres de alcohol, tabaco y drogas” y que hace muchos años se trabajó con los equipos Santos de Guápiles y Carmelita, pero que aunque está disponible actualmente ningún club lo está aplicando.
“Para estos equipos es fundamental introducir este tema sobre todo a nivel de ligas menores, para que los chicos conozcan los peligros que pueden enfrentar luego, cuando les llegue la fama, tal vez sin estar psicológicamente preparados para ella”.
Odio comentó además que en estos casos no hay que destrozar al jugador y perjudicar su carrera como futbolista, sino más bien revisar los procesos y buscar la mejor forma de ejercer controles porque el alcohol “es algo que muchos futbolistas prueban pero no abusan; sin embargo, otros se quedan enganchados en un punto del que hay veces no hay regreso”.
Para el famoso Sócrates fue así, falleció el 4 de diciembre de año 2011 a los 57 años de edad. El Doctor, como le decían (era médico de profesión) reconoció públicamente haber tenido problemas con el alcohol, especialmente durante su época de jugador, y murió por presentar una cirrosis hepática bastante avanzada, la que confluyó con otros males y le originó una septicemia fulminante. Garrincha murió en 1983 a causa de una cirrosis ocasionada por la ingesta descontrolada de alcohol y el irlandés Best, icono del Manchester United y también alcohólico, falleció en 2005 como consecuencia de problemas renales y pulmonares, tras recibir un trasplante de hígado en 2002.
Luis Rojas
lrojas@larepublica.net