Jefe de asuntos políticos de la ONU viajará a Egipto
Sharon Cascante scascante@larepublica.net | Sábado 17 agosto, 2013 12:00 a. m.
Jefe de asuntos políticos de la ONU viajará a Egipto
Jeffrey Feltman, jefe de asuntos políticos de Naciones Unidas, viajará la próxima semana a El Cairo y espera reunirse con las autoridades egipcias para abordar la conflictiva situación en ese país.
Así lo anunció hoy ante la prensa Eduardo del Buey, portavoz de la ONU, quien detalló que el secretario general, Ban Ki-moon, ha pedido al diplomático estadounidense que viaje a Egipto y a otros países de la zona.
Durante su viaje a la región, el subsecretario general de asuntos políticos de la ONU mantendrá una ronda de consultas con diferentes países y espera reunirse con interlocutores egipcios, según Del Buey, quien no especificó qué otros países visitará Feltman.
El anuncio del viaje de Feltman llega un día después de que el Consejo de Seguridad celebrara una ronda de consultas a puerta cerrada en la que Jan Eliasson, secretario general adjunto de la ONU, presentó un informe sobre la crisis en Egipto.
Después de las consultas, la presidenta de turno del Consejo, María Cristina Perceval, embajadora argentina, mostró la preocupación de los 15 miembros por la grave situación en Egipto y pidió máxima contención y el final de la violencia.
Egipto se ha sumergido en una espiral de violencia desde el pasado miércoles cuando la policía atacó dos acampadas de los islamistas en El Cairo para desmantelarlas, y desde entonces han muerto más de 500 personas, según las autoridades.
La tensión es muy alta en la capital, donde los simpatizantes de los Hermanos Musulmanes protestan hoy en una jornada que han bautizado como "Viernes de la Ira", pese a que el Ejército se ha desplegado ampliamente por la ciudad.
De momento más de 50 personas han muerto en los choques entre partidarios y detractores del depuesto presidente egipcio Mohamed Mursi en el barrio de Ramsés, en el centro de El Cairo, según la Hermandad.
Los partidarios del expresidente Mursi, que continúa bajo arresto domiciliario, protestan por el reciente desalojo de sus dos acampadas y por el golpe de Estado que el pasado 3 de julio depuso al mandatario islamista.