Ejecutivos golfistas sí cotizan mejor
Cristian Williams cwilliams@larepublica.net | Viernes 23 noviembre, 2007
Ejecutivos golfistas sí cotizan mejor
Cristian Williams
cwilliams@larepublica.net
Mientras en las grandes empresas de Estados Unidos, un país con 30 millones de golfistas censados, ponen objeciones a la contratación de altos ejecutivos cuyo nivel de golf sea óptimo, en Madrid se acaba de presentar un estudio según el cual la cotización en bolsa es más elevada en aquellas compañías con ejecutivos que practican este deporte.
El estudio, elaborado por la Universidad Camilo José Cela, de Madrid, y patrocinado por la empresa Xoleussyo, no surgió para rebatir la primera aseveración y que ratificó la presidenta de la Federación Española de Golf (RFEG), Emma Villacieros, en el acto de presentación de este trabajo en la Bolsa de Madrid.
Simplemente, esta investigación arroja unos datos irrefutables: aquellas empresas cuyos altos ejecutivos juegan al golf presentan mejores indicadores bursátiles en el Mercado Continuo madrileño, con un efectivo positivo mayor en directivos con un alto nivel de juego (en golf, hándicap bajo).
Villacieros, que lleva toda su vida dedicada a este deporte, expuso lo que en los mentideros golfísticos ya se sabía: las empresas norteamericanas son reacias a contratar a estos directivos-golfistas, pues, a su juicio, “se escapan en cuanto pueden a jugar”, en una actividad que, fundamentalmente, lo que requiere es mucho tiempo (para completar un hoyo se emplea, de media, unos 15 minutos).
“Yo conozco a algunos”, admite la presidenta de la RFEG, aunque apuntó varios de los valores que sí contiene el golf y que pudieran ser válidos para trasladarlos a una acertada actividad empresarial.
Rafael Cortés Elvira, ideólogo de este proyecto y, a la sazón, rector de la mencionada Universidad, aclaró al respecto: “Es un estudio con cierta provocación. No hay causalidad ni conclusiones. Eso, con el tiempo lo harán otros”. El rector ironizó: “Me quedo con esta cita: el golf y la empresa están conectados, pues en la bolsa hay que llevarse muchos palos”.
No obstante, el estudio presenta un apartado final de conclusiones, en definitiva conectadas a la misma línea apuntada por Villacieros. Los valores que atesora el golf son como un entrenamiento en habilidades directivas: visualizar la jugada, fuerza de voluntad y disciplina, firmeza mental, control de las emociones, constante autoaprendizaje, confianza en sí mismo y pensamientos positivos.
La investigación analizó 131 empresas que cotizan en Bolsa, de las que 35 lo hacen en el Ibex, y con una base de datos de 467 principales directivos, consejeros delegados, presidentes o directores generales o financieros.
Cristian Williams
cwilliams@larepublica.net
Mientras en las grandes empresas de Estados Unidos, un país con 30 millones de golfistas censados, ponen objeciones a la contratación de altos ejecutivos cuyo nivel de golf sea óptimo, en Madrid se acaba de presentar un estudio según el cual la cotización en bolsa es más elevada en aquellas compañías con ejecutivos que practican este deporte.
El estudio, elaborado por la Universidad Camilo José Cela, de Madrid, y patrocinado por la empresa Xoleussyo, no surgió para rebatir la primera aseveración y que ratificó la presidenta de la Federación Española de Golf (RFEG), Emma Villacieros, en el acto de presentación de este trabajo en la Bolsa de Madrid.
Simplemente, esta investigación arroja unos datos irrefutables: aquellas empresas cuyos altos ejecutivos juegan al golf presentan mejores indicadores bursátiles en el Mercado Continuo madrileño, con un efectivo positivo mayor en directivos con un alto nivel de juego (en golf, hándicap bajo).
Villacieros, que lleva toda su vida dedicada a este deporte, expuso lo que en los mentideros golfísticos ya se sabía: las empresas norteamericanas son reacias a contratar a estos directivos-golfistas, pues, a su juicio, “se escapan en cuanto pueden a jugar”, en una actividad que, fundamentalmente, lo que requiere es mucho tiempo (para completar un hoyo se emplea, de media, unos 15 minutos).
“Yo conozco a algunos”, admite la presidenta de la RFEG, aunque apuntó varios de los valores que sí contiene el golf y que pudieran ser válidos para trasladarlos a una acertada actividad empresarial.
Rafael Cortés Elvira, ideólogo de este proyecto y, a la sazón, rector de la mencionada Universidad, aclaró al respecto: “Es un estudio con cierta provocación. No hay causalidad ni conclusiones. Eso, con el tiempo lo harán otros”. El rector ironizó: “Me quedo con esta cita: el golf y la empresa están conectados, pues en la bolsa hay que llevarse muchos palos”.
No obstante, el estudio presenta un apartado final de conclusiones, en definitiva conectadas a la misma línea apuntada por Villacieros. Los valores que atesora el golf son como un entrenamiento en habilidades directivas: visualizar la jugada, fuerza de voluntad y disciplina, firmeza mental, control de las emociones, constante autoaprendizaje, confianza en sí mismo y pensamientos positivos.
La investigación analizó 131 empresas que cotizan en Bolsa, de las que 35 lo hacen en el Ibex, y con una base de datos de 467 principales directivos, consejeros delegados, presidentes o directores generales o financieros.