Consumo de los ticos no apunta a reanimarse pronto

El consumo del costarricense no da signos de que vaya a incrementarse pronto si nos basamos en la Encuesta de Confianza del Consumidor más reciente.

Por ejemplo, ante la pregunta de si son buenos momentos para adquirir artículos como muebles, televisoras, refrigeradoras y cocinas, las respuestas negativas alcanzaron un abrumante 71%.

Si nos vamos a productos en específico, puede contemplarse que prácticamente siete de cada diez los considera malos momentos para comprar casa; todavía más negativismo si se habla de comprar carro.

A esto no se puede apuntar meramente a resguardarse, si no a falta de capacidad del tico de poder hacer esos gastos, puesto que si bien la capacidad parece aumentar, no alcanza niveles ideales.

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Y es que el porcentaje de hogares que posee la capacidad de realizar gastos discrecionales era de 33,6% en febrero del 2020, disminuyó hasta un 21,3% en agosto de ese año y actualmente está en 29,4%

Sin embargo, en un año, 59 de cada 100 encuestados cree que sus ingresos serán menores o iguales a los actuales.

También aunado a lo anterior, la mayoría considera que sus ingresos crecerán a menor o igual ritmo que los precios.

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En los primeros meses de la crisis por el Covid-19, el propio Rodrigo Cubero, presidente del Banco Central había previsto que un gran factor de la caída económica que esperaría a Costa Rica sería el bajo consumo.

Y es que se genera una cadena, donde si no hay consumo, las empresas no venden derivando hasta en cerrar, dejando así a más personas sin empleo, y por ende, con menos recursos para realizar gastos.

La muestra del bajo consumo se da si se observan los datos más recientes de esta autoridad monetaria, los cuales apuntan a una variación interanual del gasto de los hogares para consumo de un -5,7%.