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Caída en materias primas golpeó a Durman Esquivel

Redacción La República redaccion@larepublica.net | Lunes 13 julio, 2009




Compañía reportó pérdidas en el segundo semestre de 2008 por ventas a precios inferiores y volatilidad en monedas latinas
Caída en materias primas golpeó a Durman Esquivel
Medidas para paliar crisis abarcan reestructuración de operaciones y evaluación de negocios poco rentables

Aunque Durman Esquivel quiso protegerse ante eventuales huracanes en el Golfo de México con grandes volúmenes de inventario de materia prima, un ciclón llamado crisis económica lo tomó por sorpresa, incidiendo en sus ingresos a finales de 2008 e inicios del presente año.
La compañía dedicada a la comercialización de tubosistemas reportó pérdidas por al menos ¢9.700 millones en el segundo semestre del año pasado a raíz de una caída en los precios de sus insumos que también repercutió en el precio de venta de los productos terminados.
Otro de los factores que afectaron la operación fue la reestructuración y medidas tomadas a raíz de la crisis, que implicó gastos extraordinarios durante el segundo semestre de 2008 y en el actual.
Lo anterior se tradujo en el cierre de bodegas de distribución y disminución de sus estructuras en varios países.
Sin embargo, el diferencial cambiario fue el rubro que más influyó en las pérdidas mostradas, ya que las monedas latinoamericanas se devaluaron drásticamente en los últimos cinco meses del año pasado.
“Pese a que nosotros tomamos coberturas vía derivados financieros sobre la deuda en moneda extranjera con terceros, nos tomó sin cubrir las deudas entre compañías, lo cual se complicó porque los bancos nos limitaron las líneas de crédito para hacer derivados financieros”, comentó Mario Gómez, gerente financiero de Durman.
El derivado se refiere a un producto financiero cuyo valor se basa en el precio de otro activo, en este caso Durman Esquivel apostaba a derivados de tipo de cambio.
Como medida preventiva la empresa decidió incrementar las líneas de crédito de derivados financieros, también ha ajustado la organización a la nueva realidad del mercado, con un mejor manejo del capital de trabajo al bajar días inventario, cuentas por cobrar y negociando mejores plazos con proveedores.
“Con estas medidas liberamos fondos para poder pagar deudas y bajar el costo financiero, también hemos analizado negocios que no son muy rentables y demandan capital”, agregó Gómez.
Los socios inyectaron unos $30 millones para capitalizar a la empresa y con ello bajar deudas bancarias, gastos financieros y mejorar el flujo de caja.
En la compañía reconocen que se ha dado una caída en el volumen de negocios, situación que se mantendrá por un periodo indefinido. Sin embargo, aprovecharán las oportunidades para estar preparados para un crecimiento una vez que esta recesión encuentre una salida.
Los datos fueron dados a conocer a través de un hecho relevante publicado el pasado 7 de julio.

Karen Retana
kretana@larepublica.net






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