Agilidad y seguridad, principales aportes de APM Terminals al exportador

La optimización tecnológica introducida por la empresa AMP Terminals en la Terminal de Contenedores de Moín (TCM) les brinda a los exportadores mayor agilidad y seguridad en el despacho de sus productos.

Hoy en día, el principal puerto centroamericano muestra una eficiencia por arriba de la exigida en el contrato al lograr reducir a un tercio el tiempo de espera en puerto, con relación a lo que se tardaba anteriormente en despachar un barco.

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Es decir que lo que antes se hacía en 30 horas, ahora se realiza en diez horas, expuso Carlos Fuentes, director comercial de APM Terminals, multinacional que opera el puerto especializado de Moín.

Con 28 movimientos por hora y un tiempo de despacho de los camiones de 20 minutos en la terminal, la TCM ha logrado alcanzar, en apenas un año, los niveles de productividad que a los puertos de APM Terminals les había tomado más de dos años.

Con esos índices se les evita a las navieras perder las 48 horas que tardaban en bahía a la espera de ser atendidas, toda vez que en la actualidad tienen garantizado un espacio de operación en las ventanas apenas llegan al país.

Ese resultado es el fruto de una inversión de $1.000 millones realizada por APM Terminals en la construcción de una isla portuaria de 40 hectáreas equipada con las primeras seis grúas post panamax del país y 29 más de patio.

Poder despachar la mercancía a una mayor velocidad les genera una cadena de valor a los exportadores, pues no sólo logran colocar sus productos en las góndolas en un menor tiempo, sino que también en mejores condiciones, sobre todo aquellos que exportan perecederos.

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“Salir a tiempo de ventana hacia el siguiente puerto permite que la fruta pueda llegar con menos días de almacenamiento, lo que beneficia su calidad para poder ser vendida a un precio más alto”, destacó Fuentes.

En cuanto a seguridad, la TCM introdujo tecnología de punta y se rige por el Código de Protección de Buques e Instalaciones Portuarias, ratificado por la Organización Marítima Internacional, con lo que se niveló con los estándares de las principales terminales del mundo.

“Adicionalmente, tenemos la facilidad de escanear la carga de exportación que es propensa a ser contaminada con narcóticos, antes de ser embarcada. Esto es algo bastante nuevo en el país y que incluso ha tenido que llevar un trabajo en conjunto con las autoridades”, comentó el director Comercial.

A eso se suma otro elemento de seguridad de la carga y es que en la actualidad se entrega directamente en el puerto, con lo que se eliminó la posibilidad de manipulación, como sucedía anteriormente donde tenía que ir a predios externos y después ser transportados en camión hasta el puerto, exponiendo la carga a daños, pérdida de calidad e incluso amenaza con contaminación con narcóticos, agregó Fuente.

La digitalización es otro gran avance de la TCM a favor del exportador, pues mediante la integración del sistema de la terminal con la plataforma informática de aduanas TICA, es posible tener controels cruzados de forma digital.