Hollywood y campañas, un romance potente
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Jueves 06 septiembre, 2012
CINE
Hollywood y campañas, un romance potente
La campaña política estadounidense invita a recordar las películas más populares sobre el tema, algunas tan recientes como “Game Change”, centrada en la figura de Sarah Palin.
El material resulta irresistible en Hollywood. Apenas hay que retroceder al 10 de agosto para dar con el estreno de la última propuesta centrada en este ámbito: “The Campaign”, una comedia satírica protagonizada por Will Ferrell y Zach Galifianakis.
Estas son los títulos más recientes, pero desde luego no los más conocidos.
En esa categoría entran “Mr. Smith Goes to Washington” (1939), “Dave” (1993), “Wag the Dog” (1997), “Primary Colors” (1998), “Bulworth” (1998) o “Ides of March”, de George Clooney, estrenada el año pasado.
“Mr. Smith Goes to Washington” es un clásico de Frank Capra, ganador del Oscar al mejor guion original, en el que James Stewart da vida a un joven idealista que, tras la muerte de un senador estadounidense, es escogido por un gobernador corrupto para suplir su vacante con la intención de convertirle en su propia marioneta, algo a lo que se negará en rotundo.
Un tono más ligero tenía “Dave”, una comedia con tintes dramáticos protagonizada por Kevin Kline y Sigourney Weaver en la que un hombre corriente ha de hacerse pasar por el presidente estadounidense cuando este cae en un coma.
Mucho más reflexivas y alarmantemente similares con acontecimientos que ocurrieron poco después fueron los casos de “Wag the Dog” y “Primary Colors”.
La primera, de Barry Levinson, cuenta cómo un grupo de consejeros presidenciales contrata a un productor de Hollywood para que organice una guerra ficticia contra Albania que atraiga la atención pública y lave la imagen del presidente estadounidense, hundida tras un escándalo sexual.
Algo similar ocurrió con “Primary Colors”, estrenada en marzo de 1998, en la que John Travolta encarnaba a un afable gobernador sureño, con reputación de mujeriego. La cinta llegó a las salas dos meses antes del escándalo Lewinsky.
Los Angeles / EFE
Hollywood y campañas, un romance potente
La campaña política estadounidense invita a recordar las películas más populares sobre el tema, algunas tan recientes como “Game Change”, centrada en la figura de Sarah Palin.
El material resulta irresistible en Hollywood. Apenas hay que retroceder al 10 de agosto para dar con el estreno de la última propuesta centrada en este ámbito: “The Campaign”, una comedia satírica protagonizada por Will Ferrell y Zach Galifianakis.
Estas son los títulos más recientes, pero desde luego no los más conocidos.
En esa categoría entran “Mr. Smith Goes to Washington” (1939), “Dave” (1993), “Wag the Dog” (1997), “Primary Colors” (1998), “Bulworth” (1998) o “Ides of March”, de George Clooney, estrenada el año pasado.
“Mr. Smith Goes to Washington” es un clásico de Frank Capra, ganador del Oscar al mejor guion original, en el que James Stewart da vida a un joven idealista que, tras la muerte de un senador estadounidense, es escogido por un gobernador corrupto para suplir su vacante con la intención de convertirle en su propia marioneta, algo a lo que se negará en rotundo.
Un tono más ligero tenía “Dave”, una comedia con tintes dramáticos protagonizada por Kevin Kline y Sigourney Weaver en la que un hombre corriente ha de hacerse pasar por el presidente estadounidense cuando este cae en un coma.
Mucho más reflexivas y alarmantemente similares con acontecimientos que ocurrieron poco después fueron los casos de “Wag the Dog” y “Primary Colors”.
La primera, de Barry Levinson, cuenta cómo un grupo de consejeros presidenciales contrata a un productor de Hollywood para que organice una guerra ficticia contra Albania que atraiga la atención pública y lave la imagen del presidente estadounidense, hundida tras un escándalo sexual.
Algo similar ocurrió con “Primary Colors”, estrenada en marzo de 1998, en la que John Travolta encarnaba a un afable gobernador sureño, con reputación de mujeriego. La cinta llegó a las salas dos meses antes del escándalo Lewinsky.
Los Angeles / EFE