¡Que ruede el balón!

El Rosabal Cordero es la sede del primer juego de la final el domingo a las 6 p.m.

De nuevo cara a cara, otra vez en una final, Herediano y Alajuelense inician el camino al título del Torneo de Invierno 2012. Son los dos mejores equipos del país, pero el campeonato será solo para uno.
“Es una rivalidad bonita, llegan en instancias similares, con estilos parecidos, será bonito ver cuál equipo prevalece con el manejo del balón, y que el hecho de imponer el estilo será decisivo”, considera Oscar Ramírez, entrenador de Alajuelense.
En los dos últimos años estos cuadros se han visto la cara en dos finales, que quedaron en poder de los rojinegros, en series muy cerradas que se definieron desde la tanda de penales.
Ahora llegan igual de parejos. Por un lado el campeón defensor buscará extender su paso en la cima, y por otro el equipo que demostró mejor fútbol en la etapa regular, imponiendo marca de puntos y sobre todo con sed de revancha por regresar a lo más alto.

“La experiencia va más por el lado de los jugadores, más que la experiencia propia creo que lo más importante es lo que uno logre implementar con los muchachos”, señaló Ramírez.
El técnico manudo confesó que a su equipo lo siente fuerte para una nueva final, recalcando eso sí, que ambos cuadros son similares en lo táctico, lo emotivo e individualidades.
Por su parte, el capitán florense Pablo Salazar afirmó que durante toda la semana han venido analizando las virtudes y fortalezas de su rival, “hemos estudiado los daños que nos han hecho ellos anteriormente, cómo nos han anotado, las virtudes generales y lo que podemos contrarrestarle a Alajuela”.
Para el artillero Minor Díaz, la defensa rojinegra es bastante sólida, pero dice conocerla bien y espera poder penetrarla, “paran una línea de cuatro muy coordinada, yo creo que rompiendo por el centro en velocidad podemos hacerles bastante daño, hemos visto muchos vídeos y sabemos dónde atacar a Alajuela”, manifestó Díaz, quien espera anotar en la final y ligar su tercer título de campeón.
En tanto Claudio Miguel Jara, estratega rojiamarillo, dice estar consciente de todos los puntos altos de los erizos; sin embargo, prefiere concentrarse en las fortalezas de su plantel.
La mesa está servida, solo queda esperar cuál de los dos da el primer golpe, este domingo a las 6 p.m. en el Eladio Rosabal Cordero.

Cristian Williams
cwilliams@larepublica.net