Propuesta de ampliar IVA al 13% para canasta básica, educación y salud privada causa repudio

La propuesta del presidente Carlos Alvarado para aumentar el IVA al 13% para los bienes de la canasta básica, así como cobrar el tributo para la educación y la salud privada, causó repudio generalizado entre los diputados.

El plan permitiría recaudar unos ¢400 mil millones, según el MInisterio de Hacienda.

La molestia se debe a que el gobierno no ha querido recortar el gasto público, señalaron varios legisladores, quienes advirtieron que no estarían aprobando ningún impuesto más.

"En estos momentos de crisis, pensar en subir el impuesto a la canasta básica a la educación y la salud es un acto injusto y de crueldad con los más desprotegidos", dijo Franggi Nicolás, diputada del PLN.

La iniciativa fue calificada como descabellada por los diputados de Nueva República.

Lea más: Fragilidad económica y retroceso de 30 años en empleo femenino destacan en top five del Estado de la Nación 2020

"Otra vez vuelve el PAC con la pésima estrategia de hacer parecer favorables, medidas que sólo traerán más ruina y pobreza", dijo Carmen Chan de Nueva República.

El mandatario Alvarado hizo la propuesta este miércoles en la sesión verspertina de la mesa de diálogo multisectorial, la cual, busca soluciones a los problemas del déficit, el elevado peso de la deuda y el desempleo.

El mandatario también propuso subir el IVA al 7% para los bienes de la canasta básica, pero incluyendo otra fuente de ingresos.

En este caso solo se recaudarían unos ¢80 mil millones. En ambos se estaría devolviendo lo cobrado a las familias de menos ingresos.

Lea más: Salario escolar no se tocará, según Mesa de Diálogo Multisectorial

“Estamos en una discusión de urgencia y emergencia y hay que resolverlo ahora, hay una oportunidad para construir”, dijo el presidente.

Además de subir el IVA a los bienes de la canasta básica, Alvarado propuso también un impuesto para las ganancias de la lotería por encima de ¢250 mil.

Por otra parte, la mesa de Diálogo Multisectorial resolvió ayer no cambiar las condiciones del salario escolar que disfrutan todos los empleados públicos.

Así las cosas, el gobierno no recomendará al Congreso cobrar el impuesto de renta a ese incentivo.

Tampoco sería válido eliminar el jugoso incentivo que reciben los burócratas y que es básicamente un mes más de paga.

El salario escolar es el décimo cuarto salario que reciben los funcionarios, junto al aguinaldo y los doce sueldos.

Para el 2020 el gobierno pagó a los funcionarios del gobierno central unos ¢120 mil millones por concepto de este plus.

Anteriormente el presidente manifestó su interés en cobrar tributos al salario escolar.