¡Nole y Roger a pista!

Adiós espera. Arrancó anoche (hora australiana) la acción en Melbourne Park. Luego de las buenas noticias en etapa de clasificación, es tiempo de ver a los máximos favoritos en escena. Es el caso de Novak Djokovic y Roger Federer, nada menos.
El serbio abrirá su camino ante el surcoreano Hyeon Chung (51°), uno de los grandes proyectos de la nueva camada que estará jugando su tercer cuadro de Grand Slam. De pasar al asiático, el número uno se verá con Ivan Dodig (90°) o el invitado Quentin Halys (197°), consciente de que en semifinales podría verse con Roger Federer.
Luego de un 2015 estupendo, con tres títulos del Grand Slam y un liderazgo en el ranking indiscutido, el serbio arrancó 2016 de la mejor manera, arrasando en Doha. "He rozado la perfección", planteaba tras el 6-1 y 6-2 a Rafael Nadal.
Federer, en tanto, debutará ante el georgiano Nikoloz Basilashvili (117°). Ya en segunda, se toparía con el peligroso ucraniano Alexandr Dolgopolov (36°), de buena gira previa, o el lituano Ricardas Berankis (85°).
El suizo, claro, ya fue consultado por la potencial semifinal, su principal escollo camino a su 18º título del Grand Slam. "Yo siempre trato de mejorar cómo me adapto a ciertos rivales, superficies o a mi propio juego. Y Novak es una parte de ese rompecabezas, pero no más que eso", explicó. "Novak merece una pequeña estrella al lado de su nombre, porque lo ha estado haciendo extremadamente bien. Pero yo el año pasado de hecho tuve muy buenos partidos contra él. Hoy estoy más concentrado en mi juego, para ser honestos".
Entre los que están capacitados para dar una buena sorpresa en el cierre del torneo, también debutan el checo Tomas Berdych (sexto sembrado) ante el indio Yuki Bhambri; el japonés Kei Nishikori (sétimo) contra el alemán Philipp Kohlschreiber, y el francés Jo-Wilfried Tsonga (noveno) frente al chipriota Marcos Baghdatis, finalista aquí en 2006.
Y la reina indiscutible del tenis femenino también está lista.
Serena Williams, sin acción oficial desde el último US Open, corrió de plano las dudas de la previa y afirmó que llega "en muy buena forma" al Abierto de Australia.
"Tuve una gran preparación, la verdad. Me siento al 130%. Es cierto que no llego con los partidos encima que me hubiera gustado, pero llevo ya muchos años en el circuito y sé dónde poner el foco", enmarcó la N°1 del mundo.
"La inflamación en la rodilla ya desapareció, así que estoy bien. Necesitaba un poco de tiempo, eso es todo", agregó la estadounidense.
En la recta hacia su 22° título de Grand Slam, Serena deberá lidiar de entrada con una exigente rival como Camila Giorgi y luego podría tener un temprano encuentro con Maria Sharapova en cuartos. Pero la actual campeona del certamen no quiso saber nada con análisis ni proyecciones...
"Nunca miro el cuadro, la verdad. No me importa con quién juego. En algún momento habrá que enfrentarse con todas", remató.