Logo La República

Viernes, 26 de julio de 2024



COLUMNISTAS


La demanda de parqueos

Leiner Vargas lvargas@una.ac.cr | Martes 05 mayo, 2015


La demanda de parqueos se deriva de las necesidades de movilización y del estilo de transporte que hemos impulsado en el país
 

Reflexiones

La demanda de parqueos


Aunque parece un tema conexo de poca importancia, la demanda de parqueos en nuestras empresas e instituciones puede convertirse en un problema muy serio de no planificarse a tiempo.
Una adecuada definición y planificación del tema puede servirnos como estímulo o restricción a un modelo de transporte sustentable. La demanda de parqueos se deriva de la demanda y del estilo de transporte que hemos impulsado en el país.
El uso del auto privado como estrategia para resolver la necesidad de transporte nos ha llevado a un sinsentido país en las calles, horas de horas en presas sin fin y problemas serios para asegurar un espacio dónde dejar muestro vehículo, al llegar a nuestro destino. Solucionar un problema de tal magnitud es un tema que requiere entonces mucho mayor análisis y sobre todo, soluciones que permitan ir a la fuente o causas del problema y no solo a las expresiones de corto plazo que hoy vemos.
Ampliar los parqueos resulta una solución temporal, días o meses después la demanda satura nuevamente los espacios y se genera mayor exclusión de quienes por una u otra razón no pueden llegar a tiempo a la institución o tienen que venir en horarios distintos a los habituales de la jornada.
Existen leyes específicas como la asociada a las personas con discapacidad o lo referente a un número mínimo de parqueos para visitantes que deben respetarse a toda costa. Las reglas internas de uso de parqueos no deben propiciar y fomentar el vehículo privado, por el contrario deben generar un desestímulo al transporte privado y un claro estímulo al transporte público.
Es por eso que debemos tomar un conjunto de decisiones que van en la siguiente dimensión. Reducir la demanda de transporte, mediante el teletrabajo o cambios en los horarios de trabajo de las personas que laboran en la institución. Una segunda opción es modificar las conductas en transporte favoreciendo el transporte público; debemos fomentar entre los funcionarios que se utilice el tren, el autobús y el carro compartido.
Finalmente, el  ordenamiento del parqueo institucional con políticas claras y reglas transparentes es una forma de generar incentivos en positivo para dejar nuestros vehículos y utilizar más el transporte público.
A largo plazo, el país debe  empujar un proceso de cambio en las conductas en transporte e impulsar todo tipo de cambios en materia de reducir la huella de carbono y el uso del medio de movilidad individual como mecanismo de solución a las necesidades de transporte.
No podemos convertir las escasas áreas verdes de nuestras instituciones en espacios para los vehículos, esto sería una situación insostenible y de poco sentido común. Ciertamente la solución no es una ni es mágica, pero debe iniciarse por tener planificación a futuro y claridad de no continuar atacando solo los síntomas del problema, sino sus causas.

Leiner Vargas Alfaro

www.leinervargas.com
 

NOTAS ANTERIORES








© 2024 Republica Media Group todos los derechos reservados.