El mundo es rojo y amarillo
Luis Fernado Rojas lrojas@larepublica.net | Lunes 12 julio, 2010
El mundo es rojo y amarillo
España cumplió en un Mundial lleno de decepciones
La locura se apoderó de España y también de todos los lugares en el mundo, donde hijos de la Madre Patria vivieron con intensidad una final de 120 minutos que lograron ganar con todo merecimiento.
Favoritos había muchos, pero en su mayoría decepcionaron y quedaron en el camino. Los españoles llegaron con esa etiqueta, tuvieron un tropiezo inicial, pero supieron sobreponerse y caminar con paso celestial hacia la gloria, y ayer la alcanzaron.
La celebración fue apoteósica, como tenía que ser.
No más finalizado el juego, España entera se tiró a la calle; en Barcelona, unas 75 mil personas que presenciaron el juego en la avenida María Cristina, estallaron en éxtasis y máxime que el autor del gol que valió la Copa del Mundo fue Andrés Iniesta, jugador del FC Barcelona.
Mientras los medios de comunicación enfatizaban que España es el primer campeón mundial que pese a perder su primer partido en la competencia logra la corona, miles de aficionados se desplazaban a la Fuente Mágica de Montjuïc, otro tanto lo hacía a la plaza España y otros lugares de la ciudad, y los carros inundaban las calles armando el alboroto con sus cláxones.
Por otra parte, las estrellas del deporte español se unían en un solo coro, para felicitar a la Roja. “Hay que celebrarlo durante un año entero porque es muy complicado repetir esto. Es una generación irrepetible y se lo merece”, expresó el tenista Rafa Nadal, número uno del mundo.
Por su parte, el bicampeón mundial de la Fórmula Uno, Fernando Alonso, dijo que “Hemos vivido una noche inolvidable. Me alegro por tanta gente, por mis padres y otras personas que nunca habían podido vivir un momento como este”.
El ciclista Alberto Contador, que se encuentra disputando el Tour de Francia (doble campeón de esta competencia), se mostró sumamente satisfecho con la victoria. “He vivido el partido con intensidad y cuando el árbitro pitó el final, me sentí feliz por la selección de fútbol y por todo el deporte español”.
La victoria española la resume la misma prensa de ese país, como un dejar atrás 80 años de frustraciones para convertirse en el octavo socio del club de los campeones del mundo.
La realeza también celebró, y en grande. La reina Sofía de España y los príncipes de Asturias celebraron la victoria en el vestuario del estadio Soccer City con los jugadores. Tanto la Reina como los Príncipes saludaron a los futbolistas y corearon “España es la mejor” en un acto emotivo, al que también se unió el tenor Plácido Domingo.
Mientras tanto, en Madrid, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, confesó que le saltaron las lágrimas con el triunfo de la selección española y dijo esperar que esa victoria sea un punto de inflexión para recuperar la autoestima y la unidad como país.
Hoy, para las 5 p.m. en España, el rey Juan Carlos recibirá a la selección española en el Palacio Real de Madrid, en el primer acto de homenaje a los campeones. Luego, subidos en un autobús descubierto, los jugadores harán un recorrido por la ciudad que comenzará en Moncloa a las 7 p.m. y finalizará sobre las 10 p.m., en la explanada del puente del Rey.
Luis Rojas y EFE
lrojas@larepublica.net
España cumplió en un Mundial lleno de decepciones
La locura se apoderó de España y también de todos los lugares en el mundo, donde hijos de la Madre Patria vivieron con intensidad una final de 120 minutos que lograron ganar con todo merecimiento.
Favoritos había muchos, pero en su mayoría decepcionaron y quedaron en el camino. Los españoles llegaron con esa etiqueta, tuvieron un tropiezo inicial, pero supieron sobreponerse y caminar con paso celestial hacia la gloria, y ayer la alcanzaron.
La celebración fue apoteósica, como tenía que ser.
No más finalizado el juego, España entera se tiró a la calle; en Barcelona, unas 75 mil personas que presenciaron el juego en la avenida María Cristina, estallaron en éxtasis y máxime que el autor del gol que valió la Copa del Mundo fue Andrés Iniesta, jugador del FC Barcelona.
Mientras los medios de comunicación enfatizaban que España es el primer campeón mundial que pese a perder su primer partido en la competencia logra la corona, miles de aficionados se desplazaban a la Fuente Mágica de Montjuïc, otro tanto lo hacía a la plaza España y otros lugares de la ciudad, y los carros inundaban las calles armando el alboroto con sus cláxones.
Por otra parte, las estrellas del deporte español se unían en un solo coro, para felicitar a la Roja. “Hay que celebrarlo durante un año entero porque es muy complicado repetir esto. Es una generación irrepetible y se lo merece”, expresó el tenista Rafa Nadal, número uno del mundo.
Por su parte, el bicampeón mundial de la Fórmula Uno, Fernando Alonso, dijo que “Hemos vivido una noche inolvidable. Me alegro por tanta gente, por mis padres y otras personas que nunca habían podido vivir un momento como este”.
El ciclista Alberto Contador, que se encuentra disputando el Tour de Francia (doble campeón de esta competencia), se mostró sumamente satisfecho con la victoria. “He vivido el partido con intensidad y cuando el árbitro pitó el final, me sentí feliz por la selección de fútbol y por todo el deporte español”.
La victoria española la resume la misma prensa de ese país, como un dejar atrás 80 años de frustraciones para convertirse en el octavo socio del club de los campeones del mundo.
La realeza también celebró, y en grande. La reina Sofía de España y los príncipes de Asturias celebraron la victoria en el vestuario del estadio Soccer City con los jugadores. Tanto la Reina como los Príncipes saludaron a los futbolistas y corearon “España es la mejor” en un acto emotivo, al que también se unió el tenor Plácido Domingo.
Mientras tanto, en Madrid, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, confesó que le saltaron las lágrimas con el triunfo de la selección española y dijo esperar que esa victoria sea un punto de inflexión para recuperar la autoestima y la unidad como país.
Hoy, para las 5 p.m. en España, el rey Juan Carlos recibirá a la selección española en el Palacio Real de Madrid, en el primer acto de homenaje a los campeones. Luego, subidos en un autobús descubierto, los jugadores harán un recorrido por la ciudad que comenzará en Moncloa a las 7 p.m. y finalizará sobre las 10 p.m., en la explanada del puente del Rey.
Luis Rojas y EFE
lrojas@larepublica.net