Aeris y Migración descartan que largas filas en aeropuerto tengan relación con pandemia

La atención del flujo de pasajeros en el aeropuerto Juan Santamaría no se ha visto impactada por consecuencia de la pandemia, aseguran los encargados de velar por el tráfico en la terminal.

Más bien las denuncias de largas filas en los puestos de migración y otras áreas de la terminal reportadas en los últimos meses, están relacionadas con una falla concreta en la conexión de Internet y en el aumento en la afluencia de pasajeros.

Por ejemplo, la aglomeración de personas reportada el 13 de julio coincidió con el repunte de la llegada de turistas al país por el inicio de las vacaciones de verano en Estados Unidos.

Para atender esta situación, la empresa Aeris, operadora de la terminal, incorporó personal adicional para garantizar la aplicación de los protocolos sanitarios a pesar de la alta concentración de personas.

“El avance de la situación sanitaria y las mismas respuestas de los mercados de atracción para Costa Rica nos llevaron a la necesidad de reforzar el respeto a cada una de las medidas y señalamientos sanitarios que rigen dentro de la terminal aérea. Por eso, incorporamos personal adicional destacado”, explicó Juan Belliard, director de Operaciones de Aeris.

El inicio de las vacaciones de verano de Estados Unidos provocó largas filas el pasado 13 de julio, pero se trató de un caso aislado. Cortesía/La República

También se habían reportado largas filas el 14 de junio, pero en esa ocasión se debió a la caída en el sistema que usa Migración y Extranjería.

Al parecer un clúster administrado por Racsa habría sido el culpable del incidente, pues los sistemas internos de Migración y Extranjería no sufrieron fallos durante un periodo considerable de tiempo, defendió Raquel Vargas, directora de la institución.

Aeris incorporó personal adicional para facilitar el cumplimiento de protocolos. Estos nuevos colaboradores se identifican con un chaleco color amarillo. Cortesía Aeris/La República

Otro incidente con la conexión también afectó la operación aeroportuaria el 27 de abril pasado, esta vez por un fallo en los sistemas de Internet, que además afectó el servicio brindado por las aerolíneas.

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“Es importante mencionar, que para realizar su labor, la Dirección de Migración debe hacer uso de sistemas de otras instituciones, de los cuales no tiene injerencia alguna, además, se hace uso de los accesos de red que proporciona el edificio”, mencionó Vargas.

Los encargados de la operación de la terminal aérea también descartan que las largas colas respondan a falta de personal.

Esto toda vez que mantiene los estándares de operación de 150 oficiales para atender el tráfico promedio de 245 mil personas al mes este año, lo que equivale a un policía por 54 pasajeros diarios, en promedio.

“El personal de Migración se ajusta de acuerdo con la distribución de vuelos previamente coordinada por Aeris y la Dirección General de Aviación Civil”, añadió Vargas.

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El tiempo de revisión de documentos para cada uno de los pasajeros es de 3 minutos en promedio, aunque este proceso es personalísimo para cada uno.

La coordinación Aeris-Aviación Civil también vela porque la cantidad de gente no supere el aforo permitido en la terminal y ponga en peligro la aplicación de los protocolos sanitarios, según Belliard.