¿Robots, máquinas e IA están reemplazando a los ticos en el trabajo?

La población ocupada en Costa Rica se redujo en más de 91 mil empleos para el último trimestre del año pasado en comparación con el mismo periodo del 2022.

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Se trata de empleos que se esfumaron y que en este momento nadie sabe el por qué.

Empresarios, economistas y diputados tienen diferentes hipótesis, pero una de las que suena con más fuerza está relacionada con la automatización de servicios y tareas por medio de máquinas, robots y la Inteligencia Artificial.

A ello, habría que agregar algunas condiciones que aceleran el reemplazo de los trabajadores ticos por máquinas, como, por ejemplo, la apreciación del colón frente al dólar, el alto costo energético y las elevadas cargas sociales, las cuales motivarían a las empresas a invertir en tecnología para reducir costos y contratar menos personal.

Otras posibles explicaciones están relacionadas con el divorcio existente entre los empleos disponibles y la capacidad de la mano de obra, además de las dificultades que enfrentan las empresas fuera de las zonas francas para mantenerse a flote.

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Sin importar cuál de todas estas explicaciones tiene más peso, los expertos consultados por LA REPÚBLICA señalan que la pérdida de puestos de empleo es algo “inusual y preocupante”, por lo que se requiere hacer un diagnóstico a la brevedad para evitar que la cantidad de personas ocupadas siga a la baja.

“La reducción en la cantidad de puestos de trabajo puede estar asociada a la transformación del empleo. Hoy día, la automatización, el uso de la inteligencia artificial y de plataformas digitales y servicios compartidos que se pueden utilizar en la nube, hacen que las empresas sean más óptimas en sus gastos corrientes y, con ello, en su nómina. Esto quiere decir que si antes una empresa necesitaba 10 personas en Costa Rica, ahora, con toda la tecnología, se requiere una aquí y las otras 9 pueden ser reemplazadas por inteligencia artificial u otro país con una menor economía de escala”, dijo Daniel Suchar, analista económico.

Mientras tanto, Eli Feinzaig, economista y jefe de fracción del Partido Liberal Progresista, agrega que esa automatización que describe Suchar se acelera en el país debido a lo caro que es producir en Costa Rica.

Como ejemplo, puso el aumento energético del 15% que ya están pagando las empresas y la apreciación del colón frente al dólar, lo cual golpea los ingresos de las zonas francas, el turismo y el sector exportador.

“El proceso de encarecimiento acelerado que vive Costa Rica está haciendo que la automatización avance más rápido y algunos puestos de empleo se están perdiendo en el proceso de implementación de robots y máquinas. Las empresas buscan producir con un menor costo”, dijo Feinzaig.

Los dos expertos consultados por LA REPÚBLICA y otros más advierten que la caída de la tasa de empleo requiere de una atención inmediata.

En ese sentido, Fernando Rodríguez, economista de la Universidad Nacional y exministro de Hacienda, advierte que no necesariamente los logros en materia macroeconómica del gobierno de Rodrigo Chaves se traducen en puestos de empleo y que es necesario estudiar el fenómeno.

“Estamos ante una situación inédita sin duda. Lo que está creciendo en nuestra economía es principalmente zonas francas, con un impacto mínimo (o nulo) en el empleo, mientras que el resto de sectores crecen poco o están estancados, y su crecimiento no está impulsando la creación de empleo. Si no se invierte más y el gobierno no reactiva el gasto en ciertas áreas importantes (seguridad, por ejemplo), el crecimiento económico se va a dificultar; nos quedaremos viendo cómo crecen un grupo pequeño de actividades con una vinculación muy pobre con el resto de la economía”, dijo Rodríguez.