Justicia mínima para Cartago
Luis Fernado Rojas lrojas@larepublica.net | Lunes 01 febrero, 2010
Justicia mínima para Cartago
Brujas aún no sale del armario
Luis Rojas
lrojas@larepublica.net
Brujas y Cartaginés empataron ayer a un gol, en un partido complicado para los dos, y en el que los hechiceros demostraron que están muy lejos del nivel que los hizo campeones.
Cómo se nota en Brujas la ausencia del talento creativo de Jossimar Arias y de Osman López.
Los esfuerzos de Keilor Soto, Daniel Varela y Pablo Brenes por dar un orden a la media cancha local, fracasaron ante un Cartaginés que ayer no se comportó como el equipo que sale a buscar empates, y más bien llevó la batuta durante la mayor parte del partido.
La dupla de Jorge Barbosa y Randall Brenes de verdad que es una pesadilla para cualquier defensa y la del Brujas no fue la excepción.
Un tiro libre del Chiqui y un pase de la muerte a Josué Salas, que este último desperdició, fueron dos de las pocas acciones emotivas de una primera parte en la que por otro lado, Barbosa se encargó siempre de aparecerle por todos lados a Berny Peña, obligando a trabajar extras a él y a sus compañeros de defensa.
En la complementaria, no más de arranque, Eduardo Varela quedó frente a Sequeira pero su remate cruzado salió desviado.
Mauricio Wright movió sus piezas y envió al terreno a Paolo Jiménez y a Olman Vargas. Paolo trajo al Brujas la chispa que el equipo necesitaba y en dos minutos en el terreno puso un centro que el “Travieso” Jiménez firmó en la red. Gol de dudosa justicia, para un Brujas que no había hecho mucho, hasta entonces, para ganar.
Paolo siguió jugando bien, incluso un centro suyo produjo una mano de Chang, dentro del área, que el silbatero Rafael Vega no vio. Por el contrario, el ingreso de Vargas no aportó mucho; desencanchado y desconcentrado por la afición cartaginesa que se metió mucho con él, no sumó nada para la causa hechicera.
Cuando se creía que Brujas se dejaba el triunfo, Barbosa pelea un balón por el sector derecho, logra sacar el centro y en el corazón del área aparece y le pone su sello de goleador a la jugada Randall Brenes, decretando la justicia mínima para este partido.
Brujas aún no sale del armario
Luis Rojas
lrojas@larepublica.net
Brujas y Cartaginés empataron ayer a un gol, en un partido complicado para los dos, y en el que los hechiceros demostraron que están muy lejos del nivel que los hizo campeones.
Cómo se nota en Brujas la ausencia del talento creativo de Jossimar Arias y de Osman López.
Los esfuerzos de Keilor Soto, Daniel Varela y Pablo Brenes por dar un orden a la media cancha local, fracasaron ante un Cartaginés que ayer no se comportó como el equipo que sale a buscar empates, y más bien llevó la batuta durante la mayor parte del partido.
La dupla de Jorge Barbosa y Randall Brenes de verdad que es una pesadilla para cualquier defensa y la del Brujas no fue la excepción.
Un tiro libre del Chiqui y un pase de la muerte a Josué Salas, que este último desperdició, fueron dos de las pocas acciones emotivas de una primera parte en la que por otro lado, Barbosa se encargó siempre de aparecerle por todos lados a Berny Peña, obligando a trabajar extras a él y a sus compañeros de defensa.
En la complementaria, no más de arranque, Eduardo Varela quedó frente a Sequeira pero su remate cruzado salió desviado.
Mauricio Wright movió sus piezas y envió al terreno a Paolo Jiménez y a Olman Vargas. Paolo trajo al Brujas la chispa que el equipo necesitaba y en dos minutos en el terreno puso un centro que el “Travieso” Jiménez firmó en la red. Gol de dudosa justicia, para un Brujas que no había hecho mucho, hasta entonces, para ganar.
Paolo siguió jugando bien, incluso un centro suyo produjo una mano de Chang, dentro del área, que el silbatero Rafael Vega no vio. Por el contrario, el ingreso de Vargas no aportó mucho; desencanchado y desconcentrado por la afición cartaginesa que se metió mucho con él, no sumó nada para la causa hechicera.
Cuando se creía que Brujas se dejaba el triunfo, Barbosa pelea un balón por el sector derecho, logra sacar el centro y en el corazón del área aparece y le pone su sello de goleador a la jugada Randall Brenes, decretando la justicia mínima para este partido.