Meta del Banco Central queda en el olvido por guerra en Ucrania
Inflación cerrará en más de dos dígitos y golpeará el consumo a final de año
Baja en combustibles podría alivianar un poco el impacto en setiembre y octubre, pero no subsanarlo
Tatiana Gutiérrez Wa-Chong tgutierrez@larepublica.net | Lunes 05 septiembre, 2022
El poder de compra de los costarricenses se deteriora cada día más y de acuerdo a las proyecciones, la inflación no remitirá en lo que queda del año y cerrará en un mínimo de 10%, golpeando el consumo y la generación de puestos de trabajo al cierre del año.
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La meta de inflación establecida por el Banco Central de 2% a 4% cayó en el olvido desde hace semanas.
La crisis geopolítica entre Rusia y Ucrania provocó un alza en los precios de las materias primas, a la vez que el petróleo le pasó factura al mundo, provocando en el país precios históricos superiores a los ¢1 mil por litro.
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A la fecha, el índice de precios al consumidor ronda el 11,48%, siendo el transporte, vegetales, productos lácteos, huevos, carnes y alquileres los que más subieron de precio.
“Los niveles altos y volátiles de inflación, como los actuales, hacen que para las familias sea más difícil enfrentar el costo de la vida, o sea, hacerle frente a sus necesidades básicas, como alimentos, vivienda y atención médica. Además, la inflación domina las tasas de interés y esto hace que aumente el costo de las deudas familiares”, aseguró Melvin Garita, gerente general de BN Valores.
En medio de todas las malas noticias, el fin de semana anterior empezó a regir una reducción significativa en el precio de las gasolinas; sin embargo, no tendría un mayor impacto en la inflación, ya que la súper, la regular y el diésel siguen arañando los ¢1 mil.
“Esto no le hará ni cosquillas a la proyección de inflación tan alta, pero permitirá un alivio durante setiembre y octubre para muchas familias”, aseguró Daniel Suchar, analista financiero.
La rebaja incidirá en el gasto que se hace mensualmente para disponer de vehículos particulares y los servicios de transporte, también incidirá en el flujo de caja de las empresas.
“Sin embargo, hay que recordar que esta rebaja aún mantiene los precios muy cercanos a los ¢1 mil, es decir, aún muy por encima del nivel de precios que teníamos en el país el año anterior, y la rebaja podría ser temporal, por lo que, en la medida de lo posible, es importante aprovechar la caída en el precio para realizar ahorros que nos ayuden a protegerse ante futuros incrementos de este y otros precios de la economía”, aseguró Mónica Segnini, presidenta del Consejo de Promoción de la Competitividad.
El costo de la vida se mantendría para lo que resta del 2022 y en el 2023 muy por encima del límite superior del rango meta de acuerdo a las proyecciones del Banco Central, pero el futuro de este indicador dependerá de cuando se solucione la guerra entre Rusia y Ucrania.
“Es poco probable que todos los bienes y servicios que aumentaron de precio disminuyan su valor de la misma forma en que han crecido durante este año, pero sí es esperable que en algunas materias primas se den reducciones importantes, que contribuyan a disminuir la velocidad de subida de la inflación”, destacó Segnini.
También, podrían contribuir a equiparar el poder adquisitivo de los hogares las políticas de asistencia social anunciadas por la administración de Rodrigo Chaves, la semana pasada y que el gobierno contara con más recursos si se hace una buena gestión de la deuda para eliminar las presiones en las tasas de interés.