Desarrollo y competitividad
| Martes 18 marzo, 2014
Se tiene el reto de mejorar la educación en todos los niveles, tenemos más recursos asignados que otros que han logrado más que Costa Rica, hay tareas pendientes, todos somos responsables
Desarrollo y competitividad
De acuerdo con las experiencias de países exitosos para lograr una competitividad que lleve al desarrollo, se requiere un esfuerzo nacional entre las políticas públicas de Gobierno, las universidades en sus prioridades hacia la aplicación de la ciencia, la tecnología y la innovación y del sector privado por desarrollar, innovar y aplicar nuevos desarrollos.
Esto solo se logra con verdadera voluntad de las partes, en un esfuerzo articulado a través de un plan nacional de competitividad de alto alcance, donde el interés general y de largo plazo sean los que prevalezcan.
Los sectores más dinámicos y avanzados de la economía deben articular encadenamientos productivos con otros sectores. Si esto no se da, se tienen los resultados que lamentablemente tiene Costa Rica, sectores y zonas dinámicas y prósperas y otras regiones pobres y estancadas.
Para lograr esos encadenamientos se requieren cambios importantes en las políticas vinculadas a la micro, pequeñas y medianas empresas, es necesario aprender de las buenas prácticas de otros países para desarrollar acciones que con la integración de centros de educación y capacitación (INA; universidades, colegios técnicos), la participación activa del sector privado y el Estado, puedan llevar a cabo programas y proyectos de encadenamientos productivos que den más empleo, conocimiento, producción y valor agregado al país.
La innovación en todos los ámbitos debe estimularse y desarrollarse. Las universidades públicas deben tener muy presentes las demandas de las mipymes para apoyar y desarrollar capacidades de innovación para crear ventaja competitiva.
La asignación de recursos para la innovación basados en proyectos y en logros concretos y medibles son parte del camino seguido por los países que han tenido éxito.
Las universidades públicas deben asumir el reto de la innovación para el desarrollo, acercarse más al sector productivo para que en conjunto con políticas públicas bien orientadas pueda lograr una mayor competitividad.
El país se ha abierto al comercio internacional sin mejorar la infraestructura de puertos, aeropuertos, carreteras, entre otros, esto plantea una desventaja competitiva para el productor nacional que no recibe exoneraciones y que ha visto cómo otros países, sí tienen mejores condiciones que el nuestro en esas áreas.
Por ello, es tarea fundamental del país en los próximos años el cerrar la brecha de infraestructura. Acciones y proyectos en diferentes ámbitos deben realizarse.
La clave de todos los países que han logrado mayor desarrollo ha sido la educación de alta calidad, en donde se cuenta con buenos sistemas educativos, padres responsables, educadores de calidad y los recursos suficientes para ello, son la base del éxito.
Se tiene el reto de mejorar la educación en todos los niveles, tenemos más recursos asignados que otros que han logrado más que Costa Rica, hay tareas pendientes, todos somos responsables.
Una competitividad basada en el talento humano, la innovación y la concertación de todos los actores involucrados en un plan nacional de competitividad, pensando en el desarrollo a través de la eficiencia y la equidad son claves para orientar la visión futura de Costa Rica.
Roberto Jiménez Gómez
Economista