ANÁLISIS
Obra arrancará este año, asegura desarrollador

Canal nica beneficiaría a empresas ticas

Proyecto no produciría daño ambiental al país

Habría oportunidades de negocios para las empresas costarricenses, en cuanto a una vía acuática nicaragüense, que arrancaría a finales de este año.

Persisten varias dudas acerca del proyecto, sobre todo en cuanto a su complejidad y costo; sin embargo, hay varios países interesados en ello, incluidos China, Rusia y Gran Bretaña.
Mientras tanto, el proyecto no tendría ningún impacto ambiental en Costa Rica, ya que la ruta propuesta, revelada la semana pasada, quedaría lejos de la frontera entre los dos países.

Podría haber oportunidades para algunas empresas ticas, sobre todo constructoras, así como de ingeniería, en el proyecto para hacer un canal interoceánico en Nicaragua, que arrancaría este año de acuerdo con los comentarios de la semana pasada de Wang Jing, el gerente del principal desarrollador.
Por cierto, la costarricense Meco ha sido parte de un consorcio, junto con FCC de España y la mexicana ICE, que ganó el contrato de $267 millones para las obras de excavación de la nueva sección del Canal de Panamá, que entrará en operación el año entrante.
Habría oportunidades además para varios tipos de técnicos, dado que Nicaragua carece de mano de obra calificada en varias categorías laborales.
Mientras tanto, empresas de varios países quisieran ser proveedoras del proyecto nicaragüense, incluidas las británicas, dijo la semana pasada el embajador del Reino Unido en Managua.
Rusia por su parte estaría dispuesta a liderar el proyecto, en caso de que el desarrollador principal, Hong Kong Nicaragua Development Company, no lo llevara adelante, afirmó el Canciller ruso hace un mes.
HKNDC, autorizada por la Asamblea desde el año pasado como socio de Nicaragua, es una subsidiaria de Xinwei Telecom Technology Company, con sede en Pekín.
El plan de hacer un canal interoceánico en Nicaragua desde el inicio ha generado una serie de dudas, relacionadas sobre todo con el costo y la complejidad.
En lo que a la inversión se refiere, la única cifra que ha sido mencionada es de unos $40 mil millones; sin embargo, nunca se ha revelado ningún detalle, que justificaría este monto, que además representa un costo potencialmente alto, para los barcos que utilicen esa vía.
En comparación, la ampliación del Canal de Panamá, habrá costado menos de $6 mil millones.
También ha sido cuestionada la empresa Xinwei Telecom, por tener poca experiencia en logística marítima.
El proyecto por su parte, involucra grandes retos físicos.
Para levantar los grandes barcos al Lago de Nicaragua y luego bajarlos, se requerirán esclusas de una altura de 33 metros, ocho metros más que en el caso del Lago Gatún de Panamá.
La zona este de Nicaragua es plana; no obstante, se trata de pantanos, que amenazarían con llenar constantemente el canal con lodo.
Por su parte, el Lago de Nicaragua necesitaría un dragado permanente, para que cuente con el calado adecuado para los grandes buques, así como un sistema de bombeo, para asegurar que el agua del lago no escape por las esclusas.
Por otro lado, hay interés en el proyecto, dada la evolución del transporte marítimo en los últimos años, sobre todo con la construcción de los nuevos barcos, que cargan hasta 9 mil contenedores.
Ni la sección ampliada del Canal de Panamá podría recibir los buques de más de 6 mil contenedores.
Una opción para los grandes portacontenedores es recorrer la ruta entre Asia y la costa este de Estados Unidos y Suramérica, pasando por el Canal de Suez.
Pero esa ruta es 1.700 kilómetros más larga que la que pasaría por Centroamérica, además recorrería los estrechos de Malaca, así como el Golfo de Adén, donde ha habido ataques de piratas marítimos.
En cuanto a Costa Rica, es poco probable que un canal nicaragüense tenga un impacto ambiental en este país, dado que quedaría lejos de la frontera.
Se trata de una ruta con base en el río Punta Gorda en el Caribe, y el río Brito en el Pacífico, pasando en el medio del Lago de Nicaragua, de modo que ninguna parte se encuentra cerca a la frontera con Costa Rica.
El proyecto sería de 275 kilómetros de largo, con una profundidad de por lo menos 20 metros, así como un ancho de 230 metros, de modo que cualquier buque de carga, sin importar su tamaño, podría aprovechar la vía.

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