Ahorro de ¢70 mil millones al año se espera con salario único en el sector público

Establecer un salario único para todo el sector público permitiría un ahorro anual de ¢70 mil millones.

La propuesta inició su análisis en la Asamblea Legislativa esta semana, con el objetivo de hacer más eficiente el Estado, así como recortar el gasto público.

Sin embargo, aún persiste la crítica de que la iniciativa es muy desordenada al establecer ocho subregímenes diferentes de salarios.

Y es que la propuesta hecha por Pilar Garrido, ministra de Planificación, establece ocho familias de puestos, incluyendo las categorías de personas servidoras públicas en general, del área de salud, de cuerpos policiales, de educación, de universidades públicas, de administración de la justicia, del servicio exterior y personal de confianza.

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“El texto plantea mejoras y algunos aciertos, pero debería reforzarse porque se trata de un problema estructural. Tal y como está planteada la iniciativa podría mantener las fragmentaciones que es precisamente lo que se quiere evitar (…) Los subregímenes o familias refuerzan las disparidades”, dijo Marta Acosta, contralora general.

Y es que en estos momentos, existen disparidades salariales en el sector público de hasta ¢3 millones para puestos profesionales en una misma labor y de hasta ¢800 mil para cargos no profesionales.

Por otra parte, se criticó el hecho de que la evaluación del desempeño es omisa.

La propuesta establece que dos notas de calificación inferiores a 70, se traducirían en la destitución del funcionario sin responsabilidad laboral.

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Sin embargo, la evaluación seguiría siendo resorte de las jefaturas inmediatas, tal y como se hace hoy día.

La propuesta establece un cambio de paradigma, al pasar de un esquema de salarios basado en las funciones y las competencias, a otro que elimina las distorsiones y las desigualdades salariales, bajo el criterio de que “a igual trabajo, igual salario en las mismas condiciones”, según Garrido.

Sin embargo, el salario global se aplicaría solo para nuevos trabajadores.

“Este proyecto garantizará la disciplina fiscal, pues con el salario global se evitará el crecimiento acelerado o la creación de nuevos pluses salariales a futuro, protegiendo así, la estabilidad de las finanzas públicas. Estimamos que el ahorro promedio anual de la implementación de la ley sería del 0,7% del PIB, para el sector público no financiero”, dijo Pilar Garrido, ministra de Planificación.