Volio superó difícil prueba y con éxito
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Sábado 01 marzo, 2008
Tras siete años de haber salido de las góndolas de entonces CSU, la empresa ha logrado compensar las ventas fortaleciéndose en nuevos puntos
Volio superó difícil prueba y con éxito
• Compañía celebra en 2008 sus 70 años de operaciones
• Creciente preferencia del costarricense por café puro ha impulsado la comercialización del producto
Eugenia Soto
esoto@larepublica.net
Con sus 70 años de trayectoria empresarial en Costa Rica, Café Volio S.A. ha sorteado con éxito varias pruebas de fuego para su supervivencia.
Armados con la fidelidad de sus consumidores y la calidad del su café puro, la compañía ha logrado enfrentar el incremento en el número de marcas disponibles en el mercado, los altibajos de los precios internacionales del café y especialmente el retiro de su producto de las góndolas de los establecimientos de la Corporación de Supermercados Unidos (CSU), posteriormente adquirida por Wal-Mart.
Café Volio nació en 1938, cuando fue fundada por Federico Volio e inició sus operaciones en un tramo del Mercado Central de San José. El mando de la empresa fue trasladado después a Roberto Sáenz, yerno de Volio.
“Este puesto sigue manteniéndose activo en el Mercado Central”, comentó Giancarlo Bombardelli, quien dirige actualmente la empresa.
En 1972, Carlos Bombardelli Preciado (padre de Giancarlo) le compró la compañía a Sáenz, y decidió cambiar las operaciones de la venta en mostrador a la distribución del Café Volio en los entonces incipientes supermercados del área y otros establecimientos comerciales.
Para finales de esa década, el crecimiento en el volumen de las operaciones impulsó a Bombardelli a adquirir las instalaciones de la empresa Café Aroma Tico, con el objetivo de aumentar la capacidad de producción.
La evolución del mercado en la comercialización del café ha favorecido a la compañía pues conforme se extiende la educación del consumidor crece la preferencia por el café puro por encima del café mezclado con azúcar.
“El mercado siempre ha estado dominado por el café puro y el mezclado, que es de menor precio. El consumidor ha ido aprendiendo a tomar el mejor. Este es un proceso lento pero nos ha favorecido aunque el café mezclado tenga un precio menor al de nuestros productos”, comentó Bombardelli.
La mayor popularidad del café puro amplió la base de clientes de Café Volio, empresa que dirige sus productos a las clases media y media alta del mercado.
La fidelidad de estos consumidores, que en varios casos han heredado la preferencia hacia Volio de sus padres y abuelos, fue vital para la compañía cuando hace siete años decidió retirar sus productos de los supermercados de la cadena CSU, la más grande del país.
La decisión fue difícil puesto que la cadena representaba un importante porcentaje de las ventas totales de la compañía.
La polémica desatada por la situación llegó incluso a involucrar a la Comisión para la Promoción de la Competencia del Ministerio de Economía.
Pero más allá de la fuerte reacción que desató el anuncio del retiro de Café Volio de las góndolas de Más x Menos, Pali, Hipermás y Maxi; la empresa debió adaptarse a nueva realidad.
Los ajustes a los interno de la compañía no se hicieron esperar. “En una reunión con los colaboradores les dije que el problema no solo era de la familia Bombardelli, sino de todos. Y que todos teníamos que remar para sacar el barco a flote”, indicó el presidente ejecutivo de la empresa.
Entre las medidas tomadas en ese momento estuvo mantener las comisiones de la fuerza de ventas durante seis meses, cubriendo los kilos de café no vendidos a la cadena de supermercados.
Durante este lapso, los agentes vendedores de Café Volio lograron ir construyendo una red de clientes entre abastecedores, minisúperes, y otros establecimientos comerciales en la compensación del porcentaje perdido en las ventas. Hoy la empresa atiende a 7.500 puntos de venta en el país.
“Esta estrategia funcionó muy bien. En un periodo aproximado de tres años y medio logramos recuperar nuestro nivel de ventas. Aunque fue una recuperación que llegó gota a gota”, aseveró Bombardelli.
El empresario le atribuye haber superado esta prueba de fuego a la fidelidad de los consumidores hacia el producto de Café Volio.
“Muchos seguían haciendo sus compras, pero buscaban Café Volio en otros puntos de venta, incluso esta misma demanda en pulperías nos ayudó a ampliar la distribución”, aseguró.
En la actualidad la empresa vende al mes cerca de 200 mil kilogramos de café, asegura Bombardelli.
En el mercado Café Volio, enfrenta la competencia directa de marcas que también comercializan café puro, como Café 1820 y Montaña. No obstante, Volio asegura concentrar una participación del 40% en el mercado del café puro.
“Tenemos un sistema de distribución muy eficiente que nos permite llegar a muchos lugares donde las otras marcas tienen menos presencia”, sostuvo Bombardelli.
Las ventas de la compañía, medidas por kilos de café, han experimentado un crecimiento de entre el 10% y el 15% durante los últimos dos años.
Una de las innovaciones recientes de Café Volio fue el lanzamiento hace cuatro años de una línea de café gourmet para el mercado local.
Aunque el aporte fundamental a las ventas de la compañía sigue proviniendo de la comercialización del café regular, la línea gourmet ha logrado crecer desde su introducción en el mercado.
Asimismo, los personeros de la compañía estudian un eventual ingreso al mercado estadounidense, que constituiría la primera avanzadilla de Café Volio fuera de las fronteras costarricenses.
“Hemos sido muy cautelosos en evaluar esta posibilidad por varios asuntos de logística. No queremos que la marca llegue a tener una mala imagen en el exterior”, admitió Bombardelli.
Volio superó difícil prueba y con éxito
• Compañía celebra en 2008 sus 70 años de operaciones
• Creciente preferencia del costarricense por café puro ha impulsado la comercialización del producto
Eugenia Soto
esoto@larepublica.net
Con sus 70 años de trayectoria empresarial en Costa Rica, Café Volio S.A. ha sorteado con éxito varias pruebas de fuego para su supervivencia.
Armados con la fidelidad de sus consumidores y la calidad del su café puro, la compañía ha logrado enfrentar el incremento en el número de marcas disponibles en el mercado, los altibajos de los precios internacionales del café y especialmente el retiro de su producto de las góndolas de los establecimientos de la Corporación de Supermercados Unidos (CSU), posteriormente adquirida por Wal-Mart.
Café Volio nació en 1938, cuando fue fundada por Federico Volio e inició sus operaciones en un tramo del Mercado Central de San José. El mando de la empresa fue trasladado después a Roberto Sáenz, yerno de Volio.
“Este puesto sigue manteniéndose activo en el Mercado Central”, comentó Giancarlo Bombardelli, quien dirige actualmente la empresa.
En 1972, Carlos Bombardelli Preciado (padre de Giancarlo) le compró la compañía a Sáenz, y decidió cambiar las operaciones de la venta en mostrador a la distribución del Café Volio en los entonces incipientes supermercados del área y otros establecimientos comerciales.
Para finales de esa década, el crecimiento en el volumen de las operaciones impulsó a Bombardelli a adquirir las instalaciones de la empresa Café Aroma Tico, con el objetivo de aumentar la capacidad de producción.
La evolución del mercado en la comercialización del café ha favorecido a la compañía pues conforme se extiende la educación del consumidor crece la preferencia por el café puro por encima del café mezclado con azúcar.
“El mercado siempre ha estado dominado por el café puro y el mezclado, que es de menor precio. El consumidor ha ido aprendiendo a tomar el mejor. Este es un proceso lento pero nos ha favorecido aunque el café mezclado tenga un precio menor al de nuestros productos”, comentó Bombardelli.
La mayor popularidad del café puro amplió la base de clientes de Café Volio, empresa que dirige sus productos a las clases media y media alta del mercado.
La fidelidad de estos consumidores, que en varios casos han heredado la preferencia hacia Volio de sus padres y abuelos, fue vital para la compañía cuando hace siete años decidió retirar sus productos de los supermercados de la cadena CSU, la más grande del país.
La decisión fue difícil puesto que la cadena representaba un importante porcentaje de las ventas totales de la compañía.
La polémica desatada por la situación llegó incluso a involucrar a la Comisión para la Promoción de la Competencia del Ministerio de Economía.
Pero más allá de la fuerte reacción que desató el anuncio del retiro de Café Volio de las góndolas de Más x Menos, Pali, Hipermás y Maxi; la empresa debió adaptarse a nueva realidad.
Los ajustes a los interno de la compañía no se hicieron esperar. “En una reunión con los colaboradores les dije que el problema no solo era de la familia Bombardelli, sino de todos. Y que todos teníamos que remar para sacar el barco a flote”, indicó el presidente ejecutivo de la empresa.
Entre las medidas tomadas en ese momento estuvo mantener las comisiones de la fuerza de ventas durante seis meses, cubriendo los kilos de café no vendidos a la cadena de supermercados.
Durante este lapso, los agentes vendedores de Café Volio lograron ir construyendo una red de clientes entre abastecedores, minisúperes, y otros establecimientos comerciales en la compensación del porcentaje perdido en las ventas. Hoy la empresa atiende a 7.500 puntos de venta en el país.
“Esta estrategia funcionó muy bien. En un periodo aproximado de tres años y medio logramos recuperar nuestro nivel de ventas. Aunque fue una recuperación que llegó gota a gota”, aseveró Bombardelli.
El empresario le atribuye haber superado esta prueba de fuego a la fidelidad de los consumidores hacia el producto de Café Volio.
“Muchos seguían haciendo sus compras, pero buscaban Café Volio en otros puntos de venta, incluso esta misma demanda en pulperías nos ayudó a ampliar la distribución”, aseguró.
En la actualidad la empresa vende al mes cerca de 200 mil kilogramos de café, asegura Bombardelli.
En el mercado Café Volio, enfrenta la competencia directa de marcas que también comercializan café puro, como Café 1820 y Montaña. No obstante, Volio asegura concentrar una participación del 40% en el mercado del café puro.
“Tenemos un sistema de distribución muy eficiente que nos permite llegar a muchos lugares donde las otras marcas tienen menos presencia”, sostuvo Bombardelli.
Las ventas de la compañía, medidas por kilos de café, han experimentado un crecimiento de entre el 10% y el 15% durante los últimos dos años.
Una de las innovaciones recientes de Café Volio fue el lanzamiento hace cuatro años de una línea de café gourmet para el mercado local.
Aunque el aporte fundamental a las ventas de la compañía sigue proviniendo de la comercialización del café regular, la línea gourmet ha logrado crecer desde su introducción en el mercado.
Asimismo, los personeros de la compañía estudian un eventual ingreso al mercado estadounidense, que constituiría la primera avanzadilla de Café Volio fuera de las fronteras costarricenses.
“Hemos sido muy cautelosos en evaluar esta posibilidad por varios asuntos de logística. No queremos que la marca llegue a tener una mala imagen en el exterior”, admitió Bombardelli.