Una nueva era en la gerencia
| Viernes 19 febrero, 2010
Una nueva era en la gerencia
Hoy en día nos enfrentamos a un cambio en la forma de administrar los negocios y para ello los gerentes necesitan competencias adicionales.
El nuevo paradigma para las empresas es competir en el mercado mientras se trabaja responsablemente con la naturaleza y la comunidad.
No es un secreto que la presión sobre los recursos naturales afecta también a las empresas; las materias primas se están volviendo cada vez más caras y escasas, los combustibles tradicionales escasean y bajo el modelo tradicional, extraer ambos afecta el aprovisionamiento y la calidad de vida de comunidades enteras. Para lograr cambiar esta situación las empresas del futuro necesitan gerentes de la sostenibilidad.
¿Cómo enfrentar este reto?
La clave está en establecer relaciones de largo plazo con todos aquellos grupos que se ven afectados o que afectan el accionar del negocio: proveedores, clientes, gobierno, comunidad y, por supuesto, colaboradores.
Se requiere conocer mucho más que las herramientas clásicas de la vieja escuela; la mezcla de mercadeo, el manejo de personal o la administración financiera no son suficientes para dar respuesta a las inquietudes provocadas por los impactos ambientales y sociales del negocio. Es imprescindible incluir en la estrategia empresarial cómo lidiar con nuevas presiones que pueden convertirse en una oportunidad más que una amenaza.
No se puede obviar que factores como el fácil acceso a la información las redes sociales y los medios electrónicos, entre otros, hacen que la sociedad se entere y reaccione a una velocidad impresionante cuando el desempeño de las empresas es malo, afectando muchas veces su reputación y por ende su rendimiento económico.
Muchos estudios afirman que invertir en este tema vale la pena. Además de reducir riesgos operativos y financieros, la sostenibilidad aumenta la competitividad de la organización a través de un mayor reconocimiento y lealtad de clientes y empleados, menores costos operativos logrados a través de ecoeficiencias y en futuro cercano, un mejor acceso al capital.
Comienza una nueva era para hacer crecer a las empresas y crear valor basado en la rendición de cuentas y la transparencia.
Brindar información abierta y consistente no asustará a los accionistas ni le dará ventaja a la competencia, por el contrario, le imprimirá la sostenibilidad que requiere un negocio para seguir operando por mucho más tiempo.
Mónica Gutiérrez O.
Consultora - CEGESTI
Hoy en día nos enfrentamos a un cambio en la forma de administrar los negocios y para ello los gerentes necesitan competencias adicionales.
El nuevo paradigma para las empresas es competir en el mercado mientras se trabaja responsablemente con la naturaleza y la comunidad.
No es un secreto que la presión sobre los recursos naturales afecta también a las empresas; las materias primas se están volviendo cada vez más caras y escasas, los combustibles tradicionales escasean y bajo el modelo tradicional, extraer ambos afecta el aprovisionamiento y la calidad de vida de comunidades enteras. Para lograr cambiar esta situación las empresas del futuro necesitan gerentes de la sostenibilidad.
¿Cómo enfrentar este reto?
La clave está en establecer relaciones de largo plazo con todos aquellos grupos que se ven afectados o que afectan el accionar del negocio: proveedores, clientes, gobierno, comunidad y, por supuesto, colaboradores.
Se requiere conocer mucho más que las herramientas clásicas de la vieja escuela; la mezcla de mercadeo, el manejo de personal o la administración financiera no son suficientes para dar respuesta a las inquietudes provocadas por los impactos ambientales y sociales del negocio. Es imprescindible incluir en la estrategia empresarial cómo lidiar con nuevas presiones que pueden convertirse en una oportunidad más que una amenaza.
No se puede obviar que factores como el fácil acceso a la información las redes sociales y los medios electrónicos, entre otros, hacen que la sociedad se entere y reaccione a una velocidad impresionante cuando el desempeño de las empresas es malo, afectando muchas veces su reputación y por ende su rendimiento económico.
Muchos estudios afirman que invertir en este tema vale la pena. Además de reducir riesgos operativos y financieros, la sostenibilidad aumenta la competitividad de la organización a través de un mayor reconocimiento y lealtad de clientes y empleados, menores costos operativos logrados a través de ecoeficiencias y en futuro cercano, un mejor acceso al capital.
Comienza una nueva era para hacer crecer a las empresas y crear valor basado en la rendición de cuentas y la transparencia.
Brindar información abierta y consistente no asustará a los accionistas ni le dará ventaja a la competencia, por el contrario, le imprimirá la sostenibilidad que requiere un negocio para seguir operando por mucho más tiempo.
Mónica Gutiérrez O.
Consultora - CEGESTI