Un merecido galardón a Don Beto

Activo en el periodismo desde 1944, Alberto Cañas Escalante, un destacado intelectual que se ha mantenido también en intensa labor en el mundo de la política, la cultura, la docencia universitaria, y una serie de actividades y cargos públicos y privados a que lo llevaron su capacidad, talento, formación y dedicación, acaba de ser galardonado con el Premio Nacional de Periodismo Pío Víquez 2011.

Fundador y exdirector de LA REPUBLICA, sigue defendiendo las causas en las que cree y sirviendo a los costarricenses y a su patria del modo y con las ideas que considera apropiadas en su reconocida columna Chisporroteos, en este medio.

Imposible tratar de abarcar en pocas palabras la variedad de áreas en las que ha destacado Alberto Cañas en su larga trayectoria como intelectual, diplomático, ministro de Cultura, escritor, diputado, abogado, periodista, político, académico, crítico y profundo conocedor de la historia y la realidad nacional, a quien ese amplio universo de actividades no le impidió fundar un sólido hogar y una familia.

De cultura enciclopédica, nuestro columnista deleita también al público de la radio por medio del programa “Así es la cosa” donde, en conjunto con Alvaro Fernández y Fernando Durán Ayanegui, da vida a una amena tertulia donde no faltan el acontecer político y la historia, la polémica, las anécdotas y mucho más, que entretienen a un público ya fiel día a día.

Constante defensor del idioma español, destaca también como miembro de número de la Academia Costarricense de la Lengua y con su afán de estimular y difundir la buena literatura nacional dirige el Consejo Editorial de la Universidad Estatal a Distancia.

Alberto Cañas fue ministro de Cultura y se le reconoce como gestor de la creación de dicho ministerio, fundó la Compañía Nacional de Teatro, entre otros cargos importantes relacionados con el medio cultural, recibió el Premio Magón y en varias ocasiones el Premio Nacional Aquileo J. Echeverría.

Pero también participó en la fundación de los partidos Liberación Nacional y Acción Ciudadana, fue embajador de nuestro país ante las Naciones Unidas y viceministro de Relaciones Exteriores, entre otras labores en medio de una intensa actividad política.

Como escritor, Cañas cultivó el teatro, la novela y el cuento y buscó siempre acercarse al ser costarricense. Como crítico no ha dejado nunca de señalar lo que considera errores ni de descubrir y estimular valores y aciertos.

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