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Sergio Alfaro no cumple expectativas de la oposición

Esteban Arrieta earrieta@larepublica.net | Viernes 03 julio, 2015


Uno de los principales aciertos en la gestión de Sergio Alfaro al frente del Ministerio de la Presidencia, es haber recompuesto las relaciones con los diputados del severo estado en el que se encontraban. Gerson Vargas/La República


Habla mucho y actúa poco, señalan legisladores

Sergio Alfaro no cumple expectativas de la oposición

Ministro de la Presidencia afirma que él revivió puentes de diálogo en el Congreso y sociedad civil

Incapacidad en la toma de decisiones y poca fluidez en el diálogo son las principales críticas por parte de los diputados de oposición hacia Sergio Alfaro como ministro de la Presidencia.
A tan solo dos meses y medio de haber jurado para el cargo, el PLN, el Frente Amplio, el Movimiento Libertario y el PUSC, cambiaron los aplausos que acompañaron ese nombramiento a mediados de abril, por severas críticas.
Mientras tanto, Alfaro destaca que revivió los puentes de diálogo con los diputados y la sociedad civil y que el Gobierno trabaja sin mayores sobresaltos.
En cuanto a lo que más preocupa a la oposición es que de seguir por esta senda de supuesta “parsimonia”, se perderá valioso tiempo para aprobar reformas importantes que requiere el país.
Los legisladores exigen una ley de empleo público, la limitación de las pensiones y medidas desde el Gobierno para recortar el gasto.
Aunque los congresistas reconocen que las relaciones entre la Asamblea y Zapote se recompusieron del severo estado en el que se encontraban cuando Melvin Jiménez estaba como ministro de la Presidencia, esto no significa que el diálogo sea fluido.
En ese sentido, señalan que aunque sí se conversa más a menudo, no se siente la presencia del Gobierno en el Congreso.
“Cuando estaba Melvin de ministro, acá teníamos constantemente a Daniel Soley conversando con nosotros y ahora tenemos a Luis Paulino Mora, pero este no se acerca a los diputados. En el caso del Frente Amplio, no hay comunicación”, indica Gerardo Vargas, jefe de fracción del Frente Amplio.
Por otra parte, hay una percepción de que no tiene liderazgo para tomar decisiones y por eso algunos, como Otto Guevara, jefe de fracción del Movimiento Libertario, lo consideran como “ralito”.
Desde que fue nombrado, Alfaro demostró ser una persona comedida a la hora de responder las preguntas de la prensa.
Esa característica, que en principio fue una virtud, es ahora cuestionada por los legisladores.
Mientras tanto, Alfaro se sacude de las críticas y señala alguna de sus principales virtudes en el ejercicio del cargo.
“Estoy satisfecho con la labor que he realizado en este puesto tan difícil, sin embargo, hemos tratado de hacer lo mejor que se puede, de acuerdo a mis habilidades. Mi labor ha sido proactiva al reunirme con los diputados y tener reuniones bilaterales con los ministros. Por otra parte, buscamos conformar un gobierno cercano a la gente”, concluye Alfaro.
Alfaro sustituyó a Melvin Jiménez al cabo de un año, porque este perdió la confianza de fracciones como el PLN, el PUSC y el Movimiento Libertario y debido a los escándalos políticos en los que se vio envuelto.


Esteban Arrieta
earrieta@larepublica.net
@earrietaLR








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