Reducción de homicidios no se lograría con nueva ley de armas

La meta de reducir la cantidad de homicidios no sería posible, si los diputados insisten en una serie de cambios a la ley armas que serían contraproducentes, según Michael Soto, ministro de Seguridad.

El gobierno no pretende el desarme de la población civil, sino tener un mayor control sobre el uso de estos dispositivos.

El Ministro se refiere principalmente a que los legisladores abrieron un portillo para que el permiso de portación de armas a personas con antecedentes criminales, solo se podría revocar por medio de un mandato de un juez y no por la vía administrativa como ocurre actualmente.

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Asimismo, Soto se opone a que cada persona pueda tener hasta tres armas de fuego, cuando lo ideal es que el límite no sea mayor a un arma.

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La idea del gobierno es que el mercado lícito no se convierta en un proveedor de los antisociales en última instancia.

“El proyecto original no afectaba a los tenedores responsables de armas. Sin embargo, desde el Ministerio de Seguridad nos oponemos completamente al proyecto con las mociones aprobadas ayer, pues impiden continuar generando resultados positivos en materia de seguridad y reducción de homicidios”, afirmó Soto.

Una reforma a la ley de armas se tramita en la Comisión de Seguridad de la Asamblea Legislativa.