No dejemos que el dengue nos gane
Con el inicio de las vacaciones escolares de medio año y el incremento del dengue en zonas turísticas, esto puede empeorar seriamente si no tomamos medidas para ganar la guerra contra esa enf
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Jueves 01 julio, 2010
Los malos hábitos de los costarricenses han convertido el dengue en una peligrosa enfermedad que ataca cada vez más y, en ocasiones, si repite, puede matar.
Con el inicio de las vacaciones escolares de medio año y el incremento de la enfermedad en zonas que son de gran afluencia de turistas, como Guanacaste, esto puede empeorar seriamente si no tomamos medidas para ganar la guerra al mosquito transmisor de este mal.
¿Por qué no ha podido erradicarse esta enfermedad en el país a pesar de los esfuerzos realizados por las autoridades de Salud? Porque nuestros hábitos y falta de cuidado proporcionan al insecto (el mosquito hembra, que es también el que pica) los lugares que necesita para poner sus huevos y que estos nazcan.
Cada hembra vive unos 30 días y puede poner de 70 a 150 huevos por vez. Lo hace en diez ocasiones durante su vida y de esa forma es como tenemos cada vez más Aedes aegypti en Costa Rica y aumentan los casos de enfermos de dengue.
Para que el mosquito pueda depositar sus huevos debe encontrar depósitos con agua, donde estos y las larvas podrán sobrevivir muy bien. Es decir, que somos las personas quienes les proporcionamos todas las facilidades para que estos insectos se reproduzcan. Solo en el último mes aumentaron en 2 mil los enfermos de dengue a nivel nacional llegando la cifra de casos a 8.500.
Las acciones de fumigación del Ministerio de Salud, que son muy efectivas para eliminar los mosquitos adultos, no matan las larvas. Para combatir también a estas es necesario que la gente deje de tener plantas en agua, de colocar platos debajo de las macetas, de tener llantas u otros recipientes que puedan almacenar lluvia en sus patios o jardines y que cepille todos los días los recipientes de sus mascotas además de cambiarles el líquido.
Si esto no se hace, si no actuamos como debemos en esta lucha contra una enfermedad, por más campañas y acciones que las autoridades realicen, no podremos deshacernos del dengue, un mal que está en nuestras manos erradicar.