Ignorar a las FARC pide gobierno colombiano
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Sábado 04 febrero, 2012
Ignorar a las FARC pide gobierno colombiano
El Gobierno de Colombia pidió ayer no caer en el juego de las FARC al advertir de que esta guerrilla se ha visto forzada a "llamar la atención" con varios atentados que han dejado desde el miércoles 19 muertos y 78 heridos.
"Es natural que exista inquietud en relación con estos hechos criminales de los últimos días, pero no podemos perder la perspectiva", reclamó el alto consejero presidencial para la Seguridad y la Convivencia Ciudadana, Francisco José Lloreda.
Asimismo advirtió, en declaraciones a Caracol Radio, de que Colombia está ante un grupo rebelde que "se ha visto forzado a regresar a tácticas del pasado, de guerra de guerrillas, cobardes".
Muestra de ello, según Lloreda, son los cruentos ataques con explosivos del miércoles en Tumaco, ciudad portuaria del Pacífico, y del jueves en los municipios de Villa Rica (Cauca) y Cajamarca (Tolima), en ambos casos en el suroeste del país.
En tanto, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, consideró que es imperativo robustecer las fuerzas de seguridad con un "paquete de medidas legales y tecnológicas que permitirán combatir el terrorismo".
A su juicio, esa es la única manera de preparar el sistema defensivo colombiano ante acciones guerrilleras como las vividas esta semana, que calificó como "una demostración de irracionalidad, de locura".
Precisamente ha sido el Gobierno de Santos el que ha asestado los mayores golpes a esa guerrilla en su casi medio siglo de lucha armada con las muertes en combate del último máximo jefe, "Alfonso Cano", en noviembre pasado, y del responsable militar, alias "Mono Jojoy", en septiembre de 2010.
Aparte de esos atentados consumados, que han dejado 19 muertos y 76 heridos, las autoridades atribuyeron a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) una emboscada el jueves y la colocación de tres coches bomba este viernes, también en el suroeste del país.
La detonación controlada de un vehículo en Miranda (Cauca) causó daños materiales y heridas leves a dos personas, mientras que en el cercano municipio de Pradera (Valle del Cauca) artificieros trataban también hoy de desconectar otros dos coches bomba, confirmaron a Efe fuentes de ambos gobiernos locales.
Las FARC son "una guerrilla a la que se le han descabezado de forma gradual sus comandantes y que está buscando llamar la atención, amedrentar, y lo que no podemos como colombianos es caer en ese juego", insistió el consejero Lloreda.
Sea o no ese el interés de los rebeldes, el coordinador del Observatorio de Conflicto Armado de la Corporación Nuevo Arco Iris (CNAI), Ariel Ávila, dijo a Efe que, de hecho, los ataques recientes "causan un impacto mediático impresionante".
Consideró, además, que esas acciones estarían enviando mensajes contradictorios, en el sentido de que las FARC "no están tan debilitadas" y, por otro lado, estarían haciendo una ficticia demostración de fuerza para forzar el diálogo.
Esta oleada terrorista desató el viernes un fuerte rechazo más allá de las fronteras colombianas.
Desde el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y la alta representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Catherine Ashton, hasta los Gobiernos de España, Francia y México repudiaron los atentados por "atroces", "execrables", "lamentables" o "inaceptables".
Bogotá/EFE
El Gobierno de Colombia pidió ayer no caer en el juego de las FARC al advertir de que esta guerrilla se ha visto forzada a "llamar la atención" con varios atentados que han dejado desde el miércoles 19 muertos y 78 heridos.
"Es natural que exista inquietud en relación con estos hechos criminales de los últimos días, pero no podemos perder la perspectiva", reclamó el alto consejero presidencial para la Seguridad y la Convivencia Ciudadana, Francisco José Lloreda.
Asimismo advirtió, en declaraciones a Caracol Radio, de que Colombia está ante un grupo rebelde que "se ha visto forzado a regresar a tácticas del pasado, de guerra de guerrillas, cobardes".
Muestra de ello, según Lloreda, son los cruentos ataques con explosivos del miércoles en Tumaco, ciudad portuaria del Pacífico, y del jueves en los municipios de Villa Rica (Cauca) y Cajamarca (Tolima), en ambos casos en el suroeste del país.
En tanto, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, consideró que es imperativo robustecer las fuerzas de seguridad con un "paquete de medidas legales y tecnológicas que permitirán combatir el terrorismo".
A su juicio, esa es la única manera de preparar el sistema defensivo colombiano ante acciones guerrilleras como las vividas esta semana, que calificó como "una demostración de irracionalidad, de locura".
Precisamente ha sido el Gobierno de Santos el que ha asestado los mayores golpes a esa guerrilla en su casi medio siglo de lucha armada con las muertes en combate del último máximo jefe, "Alfonso Cano", en noviembre pasado, y del responsable militar, alias "Mono Jojoy", en septiembre de 2010.
Aparte de esos atentados consumados, que han dejado 19 muertos y 76 heridos, las autoridades atribuyeron a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) una emboscada el jueves y la colocación de tres coches bomba este viernes, también en el suroeste del país.
La detonación controlada de un vehículo en Miranda (Cauca) causó daños materiales y heridas leves a dos personas, mientras que en el cercano municipio de Pradera (Valle del Cauca) artificieros trataban también hoy de desconectar otros dos coches bomba, confirmaron a Efe fuentes de ambos gobiernos locales.
Las FARC son "una guerrilla a la que se le han descabezado de forma gradual sus comandantes y que está buscando llamar la atención, amedrentar, y lo que no podemos como colombianos es caer en ese juego", insistió el consejero Lloreda.
Sea o no ese el interés de los rebeldes, el coordinador del Observatorio de Conflicto Armado de la Corporación Nuevo Arco Iris (CNAI), Ariel Ávila, dijo a Efe que, de hecho, los ataques recientes "causan un impacto mediático impresionante".
Consideró, además, que esas acciones estarían enviando mensajes contradictorios, en el sentido de que las FARC "no están tan debilitadas" y, por otro lado, estarían haciendo una ficticia demostración de fuerza para forzar el diálogo.
Esta oleada terrorista desató el viernes un fuerte rechazo más allá de las fronteras colombianas.
Desde el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y la alta representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Catherine Ashton, hasta los Gobiernos de España, Francia y México repudiaron los atentados por "atroces", "execrables", "lamentables" o "inaceptables".
Bogotá/EFE