EE.UU. renuncia a la amenaza militar contra Siria
EFE | Sábado 14 septiembre, 2013
EE.UU. renuncia a la amenaza militar contra Siria
Estados Unidos no insistirá en incorporar la amenaza de una acción militar contra el régimen sirio aunque éste incumpliera su compromiso de entregar las armas químicas que posee, confirmaron hoy fuentes diplomáticas.
La opción militar quedará, por tanto, excluida del proyecto de resolución que se presentará al Consejo de Seguridad de la ONU y que quedó en suspenso a la espera del resultado de la reunión que mantienen en Ginebra los jefes de la diplomacia de Estados Unidos, John Kerry, y de Rusia, Sergei Lavrov.
Ambos se reunieron este viernes por tercer día consecutivo para acordar las modalidades para garantizar que Siria quedará libre de armas químicas, que no las producirá y que sus existencias actuales serán destruidas de forma adecuada.
Barack Obama rechazó sus planes militares en Siria y propuso un debate en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para que esta emita una resolución, respaldada por el Reino Unido y Francia. Y así obligar al régimen de Bachar el Asad a entregar y desmantelar su arsenal químico.
Obama quien nunca se mostró claramente convencido de la necesidad de actuar, guardó temporalmente sus preparativos bélicos para explorar una vía diplomática incierta y que puede llevar meses concretar, expuso el periódico el País de España, quienes además afirman que esta decisión puede haber sido influenciada por la oposición rotunda de la opinión pública o quizás por el alto riesgo de ser derrotado en el Capitolio.
Anteriormente, Obama había confirmado una conversación que sostuvo por teléfono con el primer ministro británico, David Cameron, y con el presidente francés, François Hollande, para coordinar los movimientos en la ONU.
“Fui elegido para terminar guerras, no para empezarlas”, confesó Obama, durante esta semana dando así un respiro a todos en el Congreso, quienes se libraron de emitir un voto comprometedor.
Hollande y Cameron tienen una posición más cómoda en sus territorios, y los norteamericanos alejan una guerra que no han apoyado.
Sin embargo algunos sectores ya cuestionan las repercusiones que tendrá esta decisión en el interior de Siria donde se desarrolla una guerra civil con más de 100.000 muertos hasta el momento.
La solución que se plantea nace de un comentario emitido por John Kerry, secretario de Estado, el pasado lunes, sobre la posibilidad de detener el ataque previsto si el régimen sirio entregaba todo su arsenal químico. Rusia por su parte tomó las palabras de Kerry y las convirtió en una propuesta formal y el Gobierno sirio aceptó el jueves de manera oficial.
En Nueva York se pone en práctica un proyecto de resolución de los tres países que antes apoyaban la intervención militar en la que se pedirá la entrega de las armas químicas para su destrucción.
Si esa iniciativa sale adelante, para lo que Rusia, que tiene derecho de veto, tendría que permitirlo, sería la primera vez que el Consejo de Seguridad aprobase la posibilidad del uso de la fuerza en Siria.
Ginebra EFE/REDACCION