Créditos deberán pasar duras pruebas
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Sábado 19 julio, 2008
Créditos deberán pasar duras pruebas
• Crecimiento de la colocación para el presente año podría disminuir en un 50%, según estiman algunos especialistas del mercado financiero
Betzi Villalobos
bvillalobos@larepublica.net
Víctor Sanabria
vsanabria@larepublica.net
El acceso rápido a los créditos está comenzando a despedirse del mercado local. Las entidades bancarias han empezado a restringir el acceso a los préstamos, se han aumentado los requisitos para obtener financiamiento y los especialistas del mercado vaticinan desde ya que se avecinan tiempos difíciles.
Las noticias del aumento en las tasas de interés y el repunte que ha experimentado el tipo de cambio empiezan a generar dudas acerca de si las carteras crediticias están preparadas para estas variantes.
Las opiniones son diversas en el mercado y la necesidad de dar seguimiento a todos los indicadores se ha convertido en una tarea diaria para aquellos que actualmente se encuentran endeudados, esto sin importar si el préstamo es en dólares o colones.
En las últimas semanas es posible observar la caída que ha experimentado el colón frente a la divisa norteamericana.
Así por ejemplo, una persona podía comprar en enero del presente año un dólar a ¢500,97, mientras que al cierre de edición ese mismo dólar costaba ¢51 más.
La fuerte depreciación del tipo de cambio ocasionó que en la semana anterior el Banco Central (BCCR) redujera el margen de las bandas en busca de disminuir la volatilidad del mercado.
Este aumento en el tipo de cambio le ha otorgado a la autoridad monetaria un mayor espacio para utilizar las tasas de interés como instrumento para controlar la inflación, generando el inicio paulatino hacia tasas reales positivas (tasas de interés que al restarles la inflación producen rendimientos positivos).
Así por ejemplo, la tasa básica pasiva, calculada por el BCCR, presentó hace dos semanas el tercer incremento consecutivo en lo que va del año, hasta ubicarse en un 5,75%, 25 puntos básicos por encima del nivel anterior.
Esta panorama ha generado que varias entidades financieras y economistas coincidan en que se avecinan tiempos difíciles para las carteras crediticias, aunque descartan hablar de una crisis.
“Es posible que los deudores en Costa Rica vean estrecharse su flujo de caja personal, en la medida en que las tasas suban y tengan que destinar una mayor parte de su ingreso a cubrir las cuotas de los préstamos. Como es bien sabido, existe una correlación muy clara entre tasas de interés y niveles de morosidad de las carteras; cuanto mayor sea la tasa, tanto mayor la mora y viceversa”, dijo Bernardo Alfaro, subgerente general de riesgos del Banco Nacional.
Con esta opinión coincidió Alberto Franco, economista, al señalar que “el nivel de las tasas de interés va a continuar aumentando y eso les va a encarecer el servicio de la deuda a muchas empresas y personas, por lo que es probable que se dé un aumento en la morosidad de las carteras en general”.
Además del cambio en las condiciones de crédito que se puedan dar para los deudores, los especialistas describen una reducción de hasta un 50% en la cantidad de créditos otorgados.
“Veremos importantes cambios, considero que para este año se va a observar un crecimiento anual del crédito que apenas alcanzaría la mitad de lo que se logró el año anterior”, dijo Félix Delgado, economista.
Por otra parte, se ha empezado a analizar qué podría pasar con las entidades que colocaron el año anterior créditos al 100% de financiamiento.
“Si algún banco —que no es el Banco Nacional— fue imprudente, y cedió ante el afán por colocar créditos, sin cerciorarse de que realmente existirían los elementos suficientes para que el deudor pudiera hacer frente a sus condiciones de pago en momentos difíciles, tales errores saldrán a flote y se reflejarán en una mayor morosidad, y en dificultades para recuperar los préstamos”, afirmó Alfaro.
Con esta opinión coincidió Guillermo Quesada, gerente general de Bancrédito, quien agregó que “la normativa aplicable a la materia (acuerdo SUGEF 1-05), conlleva a que las entidades sean prudentes en el otorgamiento de crédito. Por tanto, las que así actuaron, tendrán menos dificultades respecto a las que fueron más liberales o actuaron a mano suelta en alcanzar crecimientos en su cartera crediticia”.
Por su parte Oscar Rodríguez, superintendente general de entidades financieras, comentó que quienes hicieron estas prácticas fueron imprudentes y es probable que el efecto empiece a verse tarde o temprano.
“Es necesario que el mercado sepa que la Superintendencia establece los porcentajes de cobertura a la cual una garantía será aceptable cuando se analiza el riesgo que una operación de crédito representa para el banco. Pero las decisiones acerca de cómo se va a trabajar a la hora de otorgar créditos la toma el banco. Así que ante estos nuevos cambios se va a poder observar quiénes son buenos banqueros y quiénes no”, dijo Rodríguez.
• Crecimiento de la colocación para el presente año podría disminuir en un 50%, según estiman algunos especialistas del mercado financiero
Betzi Villalobos
bvillalobos@larepublica.net
Víctor Sanabria
vsanabria@larepublica.net
El acceso rápido a los créditos está comenzando a despedirse del mercado local. Las entidades bancarias han empezado a restringir el acceso a los préstamos, se han aumentado los requisitos para obtener financiamiento y los especialistas del mercado vaticinan desde ya que se avecinan tiempos difíciles.
Las noticias del aumento en las tasas de interés y el repunte que ha experimentado el tipo de cambio empiezan a generar dudas acerca de si las carteras crediticias están preparadas para estas variantes.
Las opiniones son diversas en el mercado y la necesidad de dar seguimiento a todos los indicadores se ha convertido en una tarea diaria para aquellos que actualmente se encuentran endeudados, esto sin importar si el préstamo es en dólares o colones.
En las últimas semanas es posible observar la caída que ha experimentado el colón frente a la divisa norteamericana.
Así por ejemplo, una persona podía comprar en enero del presente año un dólar a ¢500,97, mientras que al cierre de edición ese mismo dólar costaba ¢51 más.
La fuerte depreciación del tipo de cambio ocasionó que en la semana anterior el Banco Central (BCCR) redujera el margen de las bandas en busca de disminuir la volatilidad del mercado.
Este aumento en el tipo de cambio le ha otorgado a la autoridad monetaria un mayor espacio para utilizar las tasas de interés como instrumento para controlar la inflación, generando el inicio paulatino hacia tasas reales positivas (tasas de interés que al restarles la inflación producen rendimientos positivos).
Así por ejemplo, la tasa básica pasiva, calculada por el BCCR, presentó hace dos semanas el tercer incremento consecutivo en lo que va del año, hasta ubicarse en un 5,75%, 25 puntos básicos por encima del nivel anterior.
Esta panorama ha generado que varias entidades financieras y economistas coincidan en que se avecinan tiempos difíciles para las carteras crediticias, aunque descartan hablar de una crisis.
“Es posible que los deudores en Costa Rica vean estrecharse su flujo de caja personal, en la medida en que las tasas suban y tengan que destinar una mayor parte de su ingreso a cubrir las cuotas de los préstamos. Como es bien sabido, existe una correlación muy clara entre tasas de interés y niveles de morosidad de las carteras; cuanto mayor sea la tasa, tanto mayor la mora y viceversa”, dijo Bernardo Alfaro, subgerente general de riesgos del Banco Nacional.
Con esta opinión coincidió Alberto Franco, economista, al señalar que “el nivel de las tasas de interés va a continuar aumentando y eso les va a encarecer el servicio de la deuda a muchas empresas y personas, por lo que es probable que se dé un aumento en la morosidad de las carteras en general”.
Además del cambio en las condiciones de crédito que se puedan dar para los deudores, los especialistas describen una reducción de hasta un 50% en la cantidad de créditos otorgados.
“Veremos importantes cambios, considero que para este año se va a observar un crecimiento anual del crédito que apenas alcanzaría la mitad de lo que se logró el año anterior”, dijo Félix Delgado, economista.
Por otra parte, se ha empezado a analizar qué podría pasar con las entidades que colocaron el año anterior créditos al 100% de financiamiento.
“Si algún banco —que no es el Banco Nacional— fue imprudente, y cedió ante el afán por colocar créditos, sin cerciorarse de que realmente existirían los elementos suficientes para que el deudor pudiera hacer frente a sus condiciones de pago en momentos difíciles, tales errores saldrán a flote y se reflejarán en una mayor morosidad, y en dificultades para recuperar los préstamos”, afirmó Alfaro.
Con esta opinión coincidió Guillermo Quesada, gerente general de Bancrédito, quien agregó que “la normativa aplicable a la materia (acuerdo SUGEF 1-05), conlleva a que las entidades sean prudentes en el otorgamiento de crédito. Por tanto, las que así actuaron, tendrán menos dificultades respecto a las que fueron más liberales o actuaron a mano suelta en alcanzar crecimientos en su cartera crediticia”.
Por su parte Oscar Rodríguez, superintendente general de entidades financieras, comentó que quienes hicieron estas prácticas fueron imprudentes y es probable que el efecto empiece a verse tarde o temprano.
“Es necesario que el mercado sepa que la Superintendencia establece los porcentajes de cobertura a la cual una garantía será aceptable cuando se analiza el riesgo que una operación de crédito representa para el banco. Pero las decisiones acerca de cómo se va a trabajar a la hora de otorgar créditos la toma el banco. Así que ante estos nuevos cambios se va a poder observar quiénes son buenos banqueros y quiénes no”, dijo Rodríguez.