Concesiones con excesivas consultorías
Danny Canales dannycanales.asesor@larepublica.net | Viernes 21 diciembre, 2007
Concesiones con excesivas consultorías
Danny Canales
dcanales@larepublica.net
El Consejo Nacional de Concesiones se sobrepasa en la contratación de consultorías para realizar los estudios que requiere para cumplir sus funciones.
Esa práctica demanda altos costos a la entidad, al tiempo que la limita para formar un grupo de profesionales de planta que realice esas funciones.
Así lo determinó un análisis realizado por la Contraloría General de la República sobre el funcionamiento de la oficina que promueve los proyectos de concesión.
El ente contralor encontró también una serie de incumplimientos de la normativa que rige esa materia.
Una de las que más alertaron al ente contralor es el hecho de que el 70% de las contrataciones analizadas presenta diferentes grados de incongruencias entre lo que se solicitó y el resultado obtenido, dice el informe.
Para el ente contralor lo anterior “pone en entredicho la existencia real de la necesidad originalmente planteada”.
Otro de los hallazgos consiste en que se desarrollaron contrataciones de consultorías con solo una oferta, sin justificar las razones.
“La obtención de una sola oferta (…) podría limitar la posibilidad de que el Consejo obtenga los servicios requeridos de profesionales idóneos y en las mejores condiciones económicas para sus intereses”, concluye la Contraloría.
La concentración del control y supervisión de los servicios contratados en la figura del Viceministro de Concesiones y la ausencia de acciones de este funcionario orientadas a la corrección de las deficiencias también fue cuestionado.
LA REPUBLICA intentó conocer la posición de Luis Diego Vargas, quien funge como viceministro de Concesiones, pero se nos informó que estaba fuera del país.
La concesión es una figura que le permite a una empresa privada financiar y construir proyectos de infraestructura pública, como carreteras, puertos o aeropuerto.
Además la figura le permite al contratista operar el proyecto por un tiempo determinado mientras recupera la inversión y obtiene la ganancia establecida en el contrato.
Danny Canales
dcanales@larepublica.net
El Consejo Nacional de Concesiones se sobrepasa en la contratación de consultorías para realizar los estudios que requiere para cumplir sus funciones.
Esa práctica demanda altos costos a la entidad, al tiempo que la limita para formar un grupo de profesionales de planta que realice esas funciones.
Así lo determinó un análisis realizado por la Contraloría General de la República sobre el funcionamiento de la oficina que promueve los proyectos de concesión.
El ente contralor encontró también una serie de incumplimientos de la normativa que rige esa materia.
Una de las que más alertaron al ente contralor es el hecho de que el 70% de las contrataciones analizadas presenta diferentes grados de incongruencias entre lo que se solicitó y el resultado obtenido, dice el informe.
Para el ente contralor lo anterior “pone en entredicho la existencia real de la necesidad originalmente planteada”.
Otro de los hallazgos consiste en que se desarrollaron contrataciones de consultorías con solo una oferta, sin justificar las razones.
“La obtención de una sola oferta (…) podría limitar la posibilidad de que el Consejo obtenga los servicios requeridos de profesionales idóneos y en las mejores condiciones económicas para sus intereses”, concluye la Contraloría.
La concentración del control y supervisión de los servicios contratados en la figura del Viceministro de Concesiones y la ausencia de acciones de este funcionario orientadas a la corrección de las deficiencias también fue cuestionado.
LA REPUBLICA intentó conocer la posición de Luis Diego Vargas, quien funge como viceministro de Concesiones, pero se nos informó que estaba fuera del país.
La concesión es una figura que le permite a una empresa privada financiar y construir proyectos de infraestructura pública, como carreteras, puertos o aeropuerto.
Además la figura le permite al contratista operar el proyecto por un tiempo determinado mientras recupera la inversión y obtiene la ganancia establecida en el contrato.