Código Verde: Terremotos hacen temblar al ambiente
| Viernes 14 septiembre, 2012
Terremotos hacen temblar al ambiente
Deslizamientos e inundaciones son las consecuencias que más dañan la naturaleza. El de Nicoya afectó sobre todo a los humedales
Los terremotos son sinónimo de deterioro en infraestructuras e inclusive de pérdidas humanas, pero otra de sus graves consecuencias son los daños ambientales.
En tierra, los deslizamientos provocados por los sismos son los más peligrosos contra la natura, principalmente en zonas montañosas. En las costas, el retiro del mar, y en los ríos la contaminación generada por las inundaciones y cabezas de agua que llevan todo a su paso.
Justamente las cabezas de agua pueden generar más daños que una inundación. Este fue el caso del terremoto en Cinchona en 2009, cuando estas dañaron muchas personas y hogares, pero también especies acuáticas por la contaminación. “El efecto sobre la vía acuática es directo, la mayoría de especies desaparecen por un tiempo, hasta que vuelven lentamente a recuperarse. Las tasas de sólidos suspendidos en el agua son tan altas que eliminan el oxígeno y mueren”, comentó Eliécer Duarte, investigador del Ovsicori.
También los humedales sufren por los fuertes movimientos de tierra, ya que tienden a desbordarse. Esto sucedió en el reciente terremoto de Nicoya, en el humedal ubicado entre Sámara y Carrillo.
El cauce del río había generado un banco de arena que dividía a ambos, pero con el movimiento este se desintegró y permitió el paso del agua, según Nelson Marín, director del Area de Conservación Tempisque y miembro del Comité Local de Emergencia de Nicoya.
Cuando hay inundación, los animales buscan terrenos más altos para salvarse. Esto en ocasiones genera problemas por el desplazamiento de las especies a otras zonas. “Hemos visto cocodrilos que llegan a las partes altas”, amplió Duarte.
Por su parte los deslizamientos podrían producir deslaves, caída de rocas y árboles, así como daños a plantas.
La mayoría de los deslizamientos o agrietamientos de terreno se dan en suelos no consolidados. Se trata de suelos que no han llevado el tratamiento adecuado como para poder construir en ellos. Ante esto, con la llegada de un terremoto, las estructuras ubicadas en esos suelos corren alto riesgo de deslizamientos y caída de árboles ubicados en pendientes, aclaró Marín.
Existen también efectos directos hacia los animales. Mucha gente cree que los animales pueden anticipar un sismo, pero hasta el momento no existen estudios contundentes que lo afirmen. Sin embargo, estudios en Rusia, Japón y China han comprobado que la fauna recibe un estrés importante al momento del sismo.
También reciben otros daños no tan directos, pero que les influyen. Un caso es el desove de tortugas en periodo de anidación. Un simple movimiento en la arena puede generar una pendiente muy alta que dificultaría su ingreso a la playa. Incluso una sacudida muy fuerte podría romper huevos ya depositados.
“Si hay un cambio en la morfología de la playa, sí se verían afectadas, porque las tortugas llegan muy tarde a la playa, entonces si se produce más pendiente o el mar se retira, todo eso las afecta”, dijo Sandra Viejobueno Muñoz, bióloga de la Fundación Pretoma.
María Fernanda Cisneros
mcisneros@larepublica.net