Bush rumbo a su última cumbre del G8
| Sábado 05 julio, 2008
Reunión estará dominada por cambio climático y precios del crudo
Bush rumbo a su última cumbre del G8
Mandatario estadounidense pedirá al Grupo de los Ocho ayuda en Irak y Afganistán
Washington
EFE
George W. Bush, presidente de Estados Unidos, viaja a Japón con la esperanza de consolidar su legado en la que será su última cumbre del Grupo de los Ocho (G8), dominada por asuntos como el cambio climático o los precios del petróleo.
Bush llega a la cumbre de Toyako con apenas siete meses restantes de mandato y una escasa popularidad, en torno al 30%, en su país, pero también tiene una ventaja: la mayoría de los líderes en la reunión se encuentran igualmente en horas bajas y él, cuando menos, mantiene una buena relación con todos ellos.
Según el analista Michael Green, del Centro de Estudios Estratégicos Internacionales (CSIS), “esta reunión del G8 es notable, por supuesto, porque es la última del presidente Bush. También es una cumbre en la que muchos de los líderes políticos están debilitados”.
“No creo que el liderazgo potencial o la estatura (de Bush) se vean tan disminuidos como parece, en parte porque les conoce a todos ellos bastante bien. Mantienen una relación de trabajo y guardan un interés común de demostrar que esta reunión puede lograr algo”, explicó Green.
La Casa Blanca se muestra optimista ante la posibilidad de conseguir resultados efectivos. “Muchos líderes quieren llegar a un acuerdo antes de que el presidente Bush se marche... Somos optimistas de que habrá muy buena voluntad”, declaró la portavoz Emily Lawrimore.
La agenda está dominada por el cambio climático. Japón y los países europeos quieren ver un acuerdo vinculante para la reducción a la mitad de la emisión de gases invernadero para 2050.
Sin embargo, este objetivo se considera improbable. Estados Unidos reclama que se sumen también las grandes economías emergentes, como India o China, que estarán presentes el miércoles en la sesión de trabajo del G8 y las principales economías.
Bush, que en abril propuso frenar las emisiones de Estados Unidos para 2025, afirma que apoya los esfuerzos del G8 para acordar metas a largo y corto plazo, y que los países impongan planes nacionales para lograrlo.
Pero el miércoles, en declaraciones a la prensa, reiteró que “no podemos tener un acuerdo efectivo a menos que China e India formen parte de ello. Es algo tan simple como eso”.
El presidente estadounidense tiene previsto celebrar reuniones bilaterales con los mandatarios de esos dos países al margen de la cumbre.
Durante la reunión, Bush quiere poner el acento en la “responsabilidad” de los países miembros del Grupo de los Ocho – Estados Unidos, Canadá, el Reino Unido, Francia, Italia, Alemania, Japón y Rusia- para que cumplan los compromisos alcanzados en reuniones anteriores en cuestiones como la lucha contra el sida.
El presidente también abordará la crisis causada por los altos precios de los alimentos y la energía.
Sin embargo, no quiso alentar expectativas de soluciones radicales: “nos ha llevado un tiempo llegar a la situación energética en la que estamos, y nos llevará un tiempo salir de ella”, declaró el miércoles.
El presidente estadounidense y los líderes también dedicarán espacio a analizar asuntos de la situación política internacional, como el programa nuclear iraní o la situación poselectoral en Zimbabue.
Asimismo, pedirá al Grupo de los Ocho ayuda en Irak y Afganistán, explicó.
Cuestiones como el programa nuclear norcoreano ocuparán más espacio en sus reuniones bilaterales.
La cumbre tiene lugar después de que Pyongyang haya presentado su pendiente declaración sobre sus actividades e instalaciones nucleares, lo que abre la puerta para que se reanuden las conversaciones a seis bandas para ofrecer a Corea del Norte incentivos económicos y diplomáticos a cambio de su renuncia a su programa atómico.
En esas conversaciones participan Estados Unidos, Rusia, China, Japón y las dos Coreas.
Bush tiene previsto reunirse a su llegada con el primer ministro japonés, Yasuo Fukuda, y el día siguiente lo hará con el nuevo mandatario ruso, Dimitri Medvédev. El miércoles, antes de su partida, se verá con el chino Hu Jintao y el presidente surcoreano, Lee Myung Bak.
Fondo Verde
México llevará a la cumbre del G-8, que se celebrará en Hokkaido (Japón) del 7 al 9 de este mes, su propuesta de Fondo Verde contra el cambio climático, anunciaron el viernes fuentes de la cancillería mexicana.
Felipe Calderón, presidente mexicano, que visitará también la próxima semana China, buscará impulsar su idea en el marco de una cumbre internacional centrada en el cambio climático y la eficiencia energética, que reunirá al G8 y al G5, del que forma parte México.
La propuesta pretende que todos los países del mundo contribuyan a un fondo verde multilateral según su población, nivel de emisiones y PIB per cápita.
“Este fondo busca permitir el acceso a recursos financieros y tecnológicos para apoyar los esfuerzos de mitigación y adaptación a escala mundial”, apuntó en rueda de prensa la subsecretaria de Relaciones Exteriores mexicana, Lourdes Aranda.
Sus claves son la mitigación de emisiones de gases con efecto invernadero, adaptación a los efectos inevitables del cambio climático y conseguir que éste no afecte al desarrollo de los países.
México presentará la iniciativa en el marco de una reunión para impulsar las negociaciones en la ONU sobre un nuevo régimen climático global, en la que también estarán Australia, Indonesia y Corea del Sur.
El G8, formado por Rusia y los siete países más desarrollados del mundo – Estados Unidos, Japón, Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y Canadá- acordó en 2007 plantearse la meta de recortar las emisiones de gases invernadero en un 50% para 2050.
La reunión de Hokkaido tratará también el tema de la crisis alimentaria global y su impacto sobre la economía mundial.
En el marco de la cumbre, los países que integran el G5 -México, India, Brasil, China y Sudáfrica-, catalogados como en desarrollo, sostendrán un encuentro previo para acercar posturas antes de la reunión con el G8.
Calderón se entrevistará también con los líderes del resto de países del G5, además de con el primer ministro japonés, Yasuo Fukuda.
El presidente mexicano efectuará después una visita de estado a China, donde se entrevistará con el presidente Hu Jintao, el primer ministro Wen Jiabao y el presidente de la Asamblea Popular Nacional (APN), Wu Bangguo.
Bush rumbo a su última cumbre del G8
Mandatario estadounidense pedirá al Grupo de los Ocho ayuda en Irak y Afganistán
Washington
EFE
George W. Bush, presidente de Estados Unidos, viaja a Japón con la esperanza de consolidar su legado en la que será su última cumbre del Grupo de los Ocho (G8), dominada por asuntos como el cambio climático o los precios del petróleo.
Bush llega a la cumbre de Toyako con apenas siete meses restantes de mandato y una escasa popularidad, en torno al 30%, en su país, pero también tiene una ventaja: la mayoría de los líderes en la reunión se encuentran igualmente en horas bajas y él, cuando menos, mantiene una buena relación con todos ellos.
Según el analista Michael Green, del Centro de Estudios Estratégicos Internacionales (CSIS), “esta reunión del G8 es notable, por supuesto, porque es la última del presidente Bush. También es una cumbre en la que muchos de los líderes políticos están debilitados”.
“No creo que el liderazgo potencial o la estatura (de Bush) se vean tan disminuidos como parece, en parte porque les conoce a todos ellos bastante bien. Mantienen una relación de trabajo y guardan un interés común de demostrar que esta reunión puede lograr algo”, explicó Green.
La Casa Blanca se muestra optimista ante la posibilidad de conseguir resultados efectivos. “Muchos líderes quieren llegar a un acuerdo antes de que el presidente Bush se marche... Somos optimistas de que habrá muy buena voluntad”, declaró la portavoz Emily Lawrimore.
La agenda está dominada por el cambio climático. Japón y los países europeos quieren ver un acuerdo vinculante para la reducción a la mitad de la emisión de gases invernadero para 2050.
Sin embargo, este objetivo se considera improbable. Estados Unidos reclama que se sumen también las grandes economías emergentes, como India o China, que estarán presentes el miércoles en la sesión de trabajo del G8 y las principales economías.
Bush, que en abril propuso frenar las emisiones de Estados Unidos para 2025, afirma que apoya los esfuerzos del G8 para acordar metas a largo y corto plazo, y que los países impongan planes nacionales para lograrlo.
Pero el miércoles, en declaraciones a la prensa, reiteró que “no podemos tener un acuerdo efectivo a menos que China e India formen parte de ello. Es algo tan simple como eso”.
El presidente estadounidense tiene previsto celebrar reuniones bilaterales con los mandatarios de esos dos países al margen de la cumbre.
Durante la reunión, Bush quiere poner el acento en la “responsabilidad” de los países miembros del Grupo de los Ocho – Estados Unidos, Canadá, el Reino Unido, Francia, Italia, Alemania, Japón y Rusia- para que cumplan los compromisos alcanzados en reuniones anteriores en cuestiones como la lucha contra el sida.
El presidente también abordará la crisis causada por los altos precios de los alimentos y la energía.
Sin embargo, no quiso alentar expectativas de soluciones radicales: “nos ha llevado un tiempo llegar a la situación energética en la que estamos, y nos llevará un tiempo salir de ella”, declaró el miércoles.
El presidente estadounidense y los líderes también dedicarán espacio a analizar asuntos de la situación política internacional, como el programa nuclear iraní o la situación poselectoral en Zimbabue.
Asimismo, pedirá al Grupo de los Ocho ayuda en Irak y Afganistán, explicó.
Cuestiones como el programa nuclear norcoreano ocuparán más espacio en sus reuniones bilaterales.
La cumbre tiene lugar después de que Pyongyang haya presentado su pendiente declaración sobre sus actividades e instalaciones nucleares, lo que abre la puerta para que se reanuden las conversaciones a seis bandas para ofrecer a Corea del Norte incentivos económicos y diplomáticos a cambio de su renuncia a su programa atómico.
En esas conversaciones participan Estados Unidos, Rusia, China, Japón y las dos Coreas.
Bush tiene previsto reunirse a su llegada con el primer ministro japonés, Yasuo Fukuda, y el día siguiente lo hará con el nuevo mandatario ruso, Dimitri Medvédev. El miércoles, antes de su partida, se verá con el chino Hu Jintao y el presidente surcoreano, Lee Myung Bak.
Fondo Verde
México llevará a la cumbre del G-8, que se celebrará en Hokkaido (Japón) del 7 al 9 de este mes, su propuesta de Fondo Verde contra el cambio climático, anunciaron el viernes fuentes de la cancillería mexicana.
Felipe Calderón, presidente mexicano, que visitará también la próxima semana China, buscará impulsar su idea en el marco de una cumbre internacional centrada en el cambio climático y la eficiencia energética, que reunirá al G8 y al G5, del que forma parte México.
La propuesta pretende que todos los países del mundo contribuyan a un fondo verde multilateral según su población, nivel de emisiones y PIB per cápita.
“Este fondo busca permitir el acceso a recursos financieros y tecnológicos para apoyar los esfuerzos de mitigación y adaptación a escala mundial”, apuntó en rueda de prensa la subsecretaria de Relaciones Exteriores mexicana, Lourdes Aranda.
Sus claves son la mitigación de emisiones de gases con efecto invernadero, adaptación a los efectos inevitables del cambio climático y conseguir que éste no afecte al desarrollo de los países.
México presentará la iniciativa en el marco de una reunión para impulsar las negociaciones en la ONU sobre un nuevo régimen climático global, en la que también estarán Australia, Indonesia y Corea del Sur.
El G8, formado por Rusia y los siete países más desarrollados del mundo – Estados Unidos, Japón, Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y Canadá- acordó en 2007 plantearse la meta de recortar las emisiones de gases invernadero en un 50% para 2050.
La reunión de Hokkaido tratará también el tema de la crisis alimentaria global y su impacto sobre la economía mundial.
En el marco de la cumbre, los países que integran el G5 -México, India, Brasil, China y Sudáfrica-, catalogados como en desarrollo, sostendrán un encuentro previo para acercar posturas antes de la reunión con el G8.
Calderón se entrevistará también con los líderes del resto de países del G5, además de con el primer ministro japonés, Yasuo Fukuda.
El presidente mexicano efectuará después una visita de estado a China, donde se entrevistará con el presidente Hu Jintao, el primer ministro Wen Jiabao y el presidente de la Asamblea Popular Nacional (APN), Wu Bangguo.