GAPARI
Así lo vimos
Gaetano Pandolfo gpandolfo@larepublica.net | Miércoles 17 agosto, 2011
ALAJUELENSE
Quesada: su virtud fue la colocación; hubo momentos apremiantes donde la ubicación lo salvó ante remates débiles de los mexicanos.
Salvatierra: terminó de sacar de la raya lo que pudo ser el empate moreliano y también gestó la acción del único gol. Tuvo una gran oportunidad en ofensiva.
González: fue el defensor que tuvo menos problemas; jugó un partido muy tranquilo ante la inoperancia de Márquez.
Acosta: se lució en algunos cortes cuando entre Corona y Lozano quisieron verticalizar el juego; también anticipó de cabeza.
Meneses: el más técnico de la defensa, siempre se adorna cuando ataca y hace una jugada de más; sacó el gol del empate a la par del vertical.
Guzmán: en la parte final del juego el equipo no necesitaba de su marca y buscó construir, sacándolo; dejó escapar con remate desviado ocasión en ataque.
Fazzio: lo presionaron bastante entre Cabrera y Ramírez y no le dejaron ventanas abiertas; se introdujo en un partido muy confuso.
Guevara: la muralla que instaló el Morelia atrás con una cintura muy poblada, asfixió las carreras del “Cusuco”; se sacrificó mucho en marca.
Sancho: uno de sus juegos más flojos, no pesó por la franja derecha porque horizontalizó en demasía su fútbol. Mucho servicio al costado y poco al área.
Gabas: lo estudiaron, lo analizaron y lo cercaron entre los dos Pérez; le dieron duro, lo bajaron con artimañas y de verdad que lo limitaron.
McDonald: anotó aprovechando que Villar soltó la bola con la complicidad de Gabas, le jugaron en la nuca y el central Jiménez, se dio gusto dándole; hasta le hizo los colochos.
Gatgens: un poco más fluido que Sancho, aunque no pesó.
Oviedo: con el ingreso de Cristian, la Liga presentó sus momentos más inteligentes; el veterano mediocampista tranquilizó a la nave y la guió al manantial del triunfo.
Alpízar: sus tiros libres llevaron incertidumbre a la retaguardia mexicana; terminó en bronca con Jiménez, el peluquero de Jonathán.