ASI LOS VIMOS
| Lunes 07 diciembre, 2009
ASI LOS VIMOS
GAPARI
CARTAGINES
Torres: lo mejor fue que transmitió seguridad al equipo; detuvo remates incómodos a Ureña y Gabas.
Hidalgo: marca personal a Gabas, una de las dos parejas férreas que ordenó Juan Luis.
Arriola: perdió la cabeza después de ser justamente expulsado por entrada a destiempo a Gabas. Tuvo un partido tranquilo.
Villalobos: sobrado para controlar al aislado Solórzano, empezó a sudar cuando tardíamente ingresó Argenis.
Martínez: en toda su carrera se ha distinguido por sus bombazos de tiro libre; por esa ruta anotó ayer un gol histórico. Antes, Alfonso le desvió mortero similar.
Alvarado: partidazo del espigado novato; se encargó de bloquear la verticalidad de Ureña y lo logró.
Granados: se ha desubicado mentalmente; agrede mucho de palabra. Antes no era así. Se le fue ocasión de gol en el cierre.
Valverde: no pudo juntarse con Berny; la Liga pobló de piernas su cintura.
Solórzano: controlado por Valle; estuvo a centímetros de meter un gol olímpico.
Pérez: recostado por el sector izquierdo, cubrió mucho terreno ante la ausencia de un carrilero natural.
Barbosa: perdió la partida con Marín; el veterano capitán le ganó todas.
Mahoney: siguió el trabajo de Arriola sin problemas.
Madrigal: Oviedo lo maniató apenas ingresó.
Aguilar: fue un toro desbocado.
ALAJUELENSE
Quesada: desvíos espectaculares a remates de Pérez, Martínez y Solórzano.
Rodríguez: error táctico garrafal de Cerqueira, abrir al carril a un volante de marca lento. Además, se nota a la legua que Ariel no gusta jugar ahí.
Dawson: se asoció con Marín para controlar a la Flecha.
Marín: el mejor jugador del partido; se hizo un juegazo el veterano capitán y se lució ante Barbosa.
Palma: el rival no punzó por su sector; salió severamente lesionado.
Castro: marcó con atención a Valverde y no subió nunca.
Oviedo: concentrado en marcar a Granados, después a Madrigal, no aportó en ataque.
Valle: se encargó de Berny; prohibido atacar.
Ureña: marcado al milímetro por Alvarado, solo una vez se le fugó.
Solórzano: atrapado entre Arriola y Chang.
González: excelente relevo.
Fernández: Argenis entró muy tarde a la acción.
Scott: llegó a tiempo al suplicio.
GAPARI
CARTAGINES
Torres: lo mejor fue que transmitió seguridad al equipo; detuvo remates incómodos a Ureña y Gabas.
Hidalgo: marca personal a Gabas, una de las dos parejas férreas que ordenó Juan Luis.
Arriola: perdió la cabeza después de ser justamente expulsado por entrada a destiempo a Gabas. Tuvo un partido tranquilo.
Villalobos: sobrado para controlar al aislado Solórzano, empezó a sudar cuando tardíamente ingresó Argenis.
Martínez: en toda su carrera se ha distinguido por sus bombazos de tiro libre; por esa ruta anotó ayer un gol histórico. Antes, Alfonso le desvió mortero similar.
Alvarado: partidazo del espigado novato; se encargó de bloquear la verticalidad de Ureña y lo logró.
Granados: se ha desubicado mentalmente; agrede mucho de palabra. Antes no era así. Se le fue ocasión de gol en el cierre.
Valverde: no pudo juntarse con Berny; la Liga pobló de piernas su cintura.
Solórzano: controlado por Valle; estuvo a centímetros de meter un gol olímpico.
Pérez: recostado por el sector izquierdo, cubrió mucho terreno ante la ausencia de un carrilero natural.
Barbosa: perdió la partida con Marín; el veterano capitán le ganó todas.
Mahoney: siguió el trabajo de Arriola sin problemas.
Madrigal: Oviedo lo maniató apenas ingresó.
Aguilar: fue un toro desbocado.
ALAJUELENSE
Quesada: desvíos espectaculares a remates de Pérez, Martínez y Solórzano.
Rodríguez: error táctico garrafal de Cerqueira, abrir al carril a un volante de marca lento. Además, se nota a la legua que Ariel no gusta jugar ahí.
Dawson: se asoció con Marín para controlar a la Flecha.
Marín: el mejor jugador del partido; se hizo un juegazo el veterano capitán y se lució ante Barbosa.
Palma: el rival no punzó por su sector; salió severamente lesionado.
Castro: marcó con atención a Valverde y no subió nunca.
Oviedo: concentrado en marcar a Granados, después a Madrigal, no aportó en ataque.
Valle: se encargó de Berny; prohibido atacar.
Ureña: marcado al milímetro por Alvarado, solo una vez se le fugó.
Solórzano: atrapado entre Arriola y Chang.
González: excelente relevo.
Fernández: Argenis entró muy tarde a la acción.
Scott: llegó a tiempo al suplicio.