A la caza de sentimientos
| Lunes 15 septiembre, 2008
A la caza de sentimientos
Publicidad busca enganchar a jubilados que se sienten culpables por haber cambiado familia por trabajo
Dave McCombs
Bloomberg
Un empleado japonés sale de su oficina por última vez y recibe la ovación de sus compañeros.
El escenario es familiar en Japón, donde la población ha envejecido.
Ese es uno de los temas que los productores de platino, por ejemplo, están usando en un comercial de televisión para reactivar las ventas de joyas que alguna vez significaron casi la mitad de las exportaciones.
El aviso apunta a atraer la atención sobre la cultura del trabajo y obligaciones del Japón, centrada en el varón, para frenar una caída de cinco años en las compras de gargantillas, brazaletes y anillos.
En el tren de regreso a su casa, el hombre no piensa cuán difíciles o estimulantes fueron las décadas de trabajo. Piensa en su esposa y mentalmente ensaya una disculpa por haberle dedicado más tiempo a su carrera que a ella.
Al llegar a su casa, le entrega flores y un anillo. Una voz superpuesta le sugiere. “Declárese otra vez”.
“En Japón, los hombres en edad de retiro son considerados como los que fijan la tendencia por tener muchos ahorros en el sistema de pensiones”, dijo Hisako Hankinson, representante de la oficina japonesa de Platinum Guild International.
Alrededor de una quinta parte de los japoneses tiene más de 65 años, casi el doble de la proporción que en Estados Unidos y tres veces la tasa de China.
Una baja en los casamientos está minando el mercado de las joyas de platino para las bodas, que constituyen hasta la mitad del total, dijo Hankinson.
Los fabricantes de platino apuntan a Japón porque ahí muchos ven como llamativo al oro amarillo, el metal competidor.
El Guild pronosticó en 2006 que su campaña del “Día de dar las gracias” dirigida a los jubilados —que incluye promociones en las tiendas y publicidad en revistas y televisión— sumaría 88 mil millones de yenes (US$806 millones) en ventas de joyas de platino en 2009. Todavía tiene que establecer una nueva meta después que los precios del metal escalaran el 48% desde 2006.
Las ventas de todo tipo de joyas caerán 3,2% a 1,16 billones de yenes el año próximo, según Yutaka Fukasawa, investigador sénior del Yano Research Institute Ltd., de Tokio, que publica un informe anual sobre el mercado japonés.
La demanda internacional para los catalizadores, usados en los filtros para emisiones de los vehículos, está subiendo y representa alrededor del 60% del consumo de platino. Aun así, los productores del metal apuestan a la joyería anticipándose a que los fabricantes de automóviles desarrollarán alternativas más baratas, dijo Peter Ryan, consultor sénior de la firma de investigaciones GFMS Ltd., también de Londres.
Publicidad busca enganchar a jubilados que se sienten culpables por haber cambiado familia por trabajo
Dave McCombs
Bloomberg
Un empleado japonés sale de su oficina por última vez y recibe la ovación de sus compañeros.
El escenario es familiar en Japón, donde la población ha envejecido.
Ese es uno de los temas que los productores de platino, por ejemplo, están usando en un comercial de televisión para reactivar las ventas de joyas que alguna vez significaron casi la mitad de las exportaciones.
El aviso apunta a atraer la atención sobre la cultura del trabajo y obligaciones del Japón, centrada en el varón, para frenar una caída de cinco años en las compras de gargantillas, brazaletes y anillos.
En el tren de regreso a su casa, el hombre no piensa cuán difíciles o estimulantes fueron las décadas de trabajo. Piensa en su esposa y mentalmente ensaya una disculpa por haberle dedicado más tiempo a su carrera que a ella.
Al llegar a su casa, le entrega flores y un anillo. Una voz superpuesta le sugiere. “Declárese otra vez”.
“En Japón, los hombres en edad de retiro son considerados como los que fijan la tendencia por tener muchos ahorros en el sistema de pensiones”, dijo Hisako Hankinson, representante de la oficina japonesa de Platinum Guild International.
Alrededor de una quinta parte de los japoneses tiene más de 65 años, casi el doble de la proporción que en Estados Unidos y tres veces la tasa de China.
Una baja en los casamientos está minando el mercado de las joyas de platino para las bodas, que constituyen hasta la mitad del total, dijo Hankinson.
Los fabricantes de platino apuntan a Japón porque ahí muchos ven como llamativo al oro amarillo, el metal competidor.
El Guild pronosticó en 2006 que su campaña del “Día de dar las gracias” dirigida a los jubilados —que incluye promociones en las tiendas y publicidad en revistas y televisión— sumaría 88 mil millones de yenes (US$806 millones) en ventas de joyas de platino en 2009. Todavía tiene que establecer una nueva meta después que los precios del metal escalaran el 48% desde 2006.
Las ventas de todo tipo de joyas caerán 3,2% a 1,16 billones de yenes el año próximo, según Yutaka Fukasawa, investigador sénior del Yano Research Institute Ltd., de Tokio, que publica un informe anual sobre el mercado japonés.
La demanda internacional para los catalizadores, usados en los filtros para emisiones de los vehículos, está subiendo y representa alrededor del 60% del consumo de platino. Aun así, los productores del metal apuestan a la joyería anticipándose a que los fabricantes de automóviles desarrollarán alternativas más baratas, dijo Peter Ryan, consultor sénior de la firma de investigaciones GFMS Ltd., también de Londres.