YouTube cambia para competir contra la tele
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Miércoles 20 abril, 2011
YouTube cambia para competir contra la tele
Las nuevas estrategias para mantener al público prendido al monitor
Que Internet lo está cambiando todo ya es una verdad de Perogrullo. Pero si algo está modificando especialmente, eso es sin dudas la televisión. Sí, la clásica tevé que todos los días vemos en casa vive una brutal transformación, a partir de la irrupción / explosión de la banda ancha. Y con ella, de la nueva costumbre que estamos adoptando de mirar vídeos, series y películas online.
La profunda transformación cultural no está exenta de unas cuantas paradojas. Por ejemplo, el principal beneficiario de este proceso es el sitio YouTube (de Google). Más de 2 mil millones de vídeos se ven por día a través de esta plataforma. Sin embargo, Google no logra hacer que el sitio sea rentable.
Y esta falta de éxito comercial (a pesar de la amplia aceptación de la audiencia) nos conduce a la siguiente paradoja. Para hacerse rentable, YouTube está planeando cruzarse al “territorio enemigo” y salir a competirle directamente a la televisión tradicional.
¿Cómo es esto? Resulta que si bien YouTube recibe millones y millones de visitas, el “webvidente” apenas permanece un par de minutos por cada vídeo, y luego parte hacia otros territorios del mundo digital. Para mantenerlos fiel al sitio y así poder vender un mayor volumen de publicidad YouTube ahora prepara dos cambios trascendentales que buscan transformar el sitio en un nuevo sistema de televisión al estilo tradicional.
Por una parte, YouTube está creando 20 “canales” de contenidos audiovisuales temáticos, que empezarán a funcionar hacia fines de año. Habrá de todo, desde arte hasta deportes, y todo lo que suele tener un sistema de cable tradicional. La gran novedad es que durante varias horas por día esos canales ofrecerán contenido original, producido en forma profesional (yendo en contra, de algún modo, del espíritu original del sitio de publicar solo el material que envía la gente).
La segunda novedad es “YouTube Live” (www.youtube.com/live), un sistema que permite y promociona la transmisión de contenido de vídeo en tiempo real o, como se conoce en la jerga de la televisión, “en vivo y en directo”. La idea de este nuevo servicio es mostrarles a los usuarios, en una primera portada, todo lo que pueden ver, en vivo, durante ese momento. Así como revisar la programación y realizar búsquedas de contenido en vivo.
YouTube Live por ahora se mantiene en versión de prueba (beta), pero el objetivo es que pronto los usuarios puedan asistir a una extensa oferta de programación en vivo proveniente, no solo de fuentes profesionales, sino también del mismo público. La idea final, en el futuro, es que todos nosotros podamos armar nuestro propio “canal de televisión”.
Con estos proyectos, Google estaría compitiendo a dos puntas. Por un lado buscaría quitarles audiencia a los canales de televisión y los sistemas de cable, y así capitalizar parte de la torta publicitaria que ellos retienen. Y por el otro, apunta a los sistemas de películas online como Netflix y Hulu en Estados Unidos, por donde se les filtra una buena porción de audiencia.
Las movidas de YouTube también pueden interpretarse como una forma de darle mayor volumen al contenido de “Google TV”, un sistema que hasta ahora no está teniendo buena repercusión. Se trata de un sistema operativo de Google que va dentro de algunos televisores y “cajas” (set top boxes) para televisores y que ofrece la posibilidad de conectarse a la Web a través de distintas aplicaciones con contenido televisivo.
Vivimos una revolución que atraviesa a todos los formatos de consumo cultural. La banda ancha modificó costumbres e industrias enteras. Cambia el libro, cambia la radio y también cambia la tele. Internet nos ofrece todo tipo de nuevas posibilidades. Y lo más apasionante es que somos nosotros quienes, con nuestras preferencias, vamos marcándole el pulso a la revolución. Empresas como YouTube, simplemente, acompañan.
Por Ricardo Braginski
rbraginski@larepublica.net
Las nuevas estrategias para mantener al público prendido al monitor
Que Internet lo está cambiando todo ya es una verdad de Perogrullo. Pero si algo está modificando especialmente, eso es sin dudas la televisión. Sí, la clásica tevé que todos los días vemos en casa vive una brutal transformación, a partir de la irrupción / explosión de la banda ancha. Y con ella, de la nueva costumbre que estamos adoptando de mirar vídeos, series y películas online.
La profunda transformación cultural no está exenta de unas cuantas paradojas. Por ejemplo, el principal beneficiario de este proceso es el sitio YouTube (de Google). Más de 2 mil millones de vídeos se ven por día a través de esta plataforma. Sin embargo, Google no logra hacer que el sitio sea rentable.
Y esta falta de éxito comercial (a pesar de la amplia aceptación de la audiencia) nos conduce a la siguiente paradoja. Para hacerse rentable, YouTube está planeando cruzarse al “territorio enemigo” y salir a competirle directamente a la televisión tradicional.
¿Cómo es esto? Resulta que si bien YouTube recibe millones y millones de visitas, el “webvidente” apenas permanece un par de minutos por cada vídeo, y luego parte hacia otros territorios del mundo digital. Para mantenerlos fiel al sitio y así poder vender un mayor volumen de publicidad YouTube ahora prepara dos cambios trascendentales que buscan transformar el sitio en un nuevo sistema de televisión al estilo tradicional.
Por una parte, YouTube está creando 20 “canales” de contenidos audiovisuales temáticos, que empezarán a funcionar hacia fines de año. Habrá de todo, desde arte hasta deportes, y todo lo que suele tener un sistema de cable tradicional. La gran novedad es que durante varias horas por día esos canales ofrecerán contenido original, producido en forma profesional (yendo en contra, de algún modo, del espíritu original del sitio de publicar solo el material que envía la gente).
La segunda novedad es “YouTube Live” (www.youtube.com/live), un sistema que permite y promociona la transmisión de contenido de vídeo en tiempo real o, como se conoce en la jerga de la televisión, “en vivo y en directo”. La idea de este nuevo servicio es mostrarles a los usuarios, en una primera portada, todo lo que pueden ver, en vivo, durante ese momento. Así como revisar la programación y realizar búsquedas de contenido en vivo.
YouTube Live por ahora se mantiene en versión de prueba (beta), pero el objetivo es que pronto los usuarios puedan asistir a una extensa oferta de programación en vivo proveniente, no solo de fuentes profesionales, sino también del mismo público. La idea final, en el futuro, es que todos nosotros podamos armar nuestro propio “canal de televisión”.
Con estos proyectos, Google estaría compitiendo a dos puntas. Por un lado buscaría quitarles audiencia a los canales de televisión y los sistemas de cable, y así capitalizar parte de la torta publicitaria que ellos retienen. Y por el otro, apunta a los sistemas de películas online como Netflix y Hulu en Estados Unidos, por donde se les filtra una buena porción de audiencia.
Las movidas de YouTube también pueden interpretarse como una forma de darle mayor volumen al contenido de “Google TV”, un sistema que hasta ahora no está teniendo buena repercusión. Se trata de un sistema operativo de Google que va dentro de algunos televisores y “cajas” (set top boxes) para televisores y que ofrece la posibilidad de conectarse a la Web a través de distintas aplicaciones con contenido televisivo.
Vivimos una revolución que atraviesa a todos los formatos de consumo cultural. La banda ancha modificó costumbres e industrias enteras. Cambia el libro, cambia la radio y también cambia la tele. Internet nos ofrece todo tipo de nuevas posibilidades. Y lo más apasionante es que somos nosotros quienes, con nuestras preferencias, vamos marcándole el pulso a la revolución. Empresas como YouTube, simplemente, acompañan.
Por Ricardo Braginski
rbraginski@larepublica.net