Una lucha inclaudicable

Después de haber superado un año trágico en cuanto a casos de dengue, la enfermedad vuelve a acechar al país pero esta vez con una amenaza mayor: el serotipo tres.

La aparición de esta nueva modalidad de dengue, encontrada en tres pacientes en el hospital de Ciudad Neily, implica un gran riesgo para la población en general, pero particularmente para quienes han sido contagiados con anterioridad.

Al estar circulando tres tipos distintos del virus, el riesgo de adquirir una infección secundaria es mayor, situación que favorece la probabilidad de que se presenten más casos de dengue hemorrágico, la manifestación más grave del padecimiento que incluso puede llegar a cobrarse la vida de sus víctimas.

En el mundo existen cuatro formas del dengue, pero en los últimos años en Costa Rica solo se habían diagnosticado pacientes con los tipos 1 y 2. Hoy en día la cepa 3 vuelve a amenazar la salud del país.

Las autoridades corrieron a hacer un cerco epidemiológico en la zona sur que, por el momento, ha evitado la aparición de más casos, sin embargo el riesgo es latente.

Hasta la cuarta semana de este año, son 424 los casos de dengue reportados, lo que se traduce en un promedio de 100 enfermos por semana.

Los esfuerzos por combatir este mal y evitar que se propague deben ser entonces proporcionales a la emergencia.

El Ministerio de Salud así como la Caja Costarricense de Seguro Social no pueden ceder un ápice en esta lucha y en el caso del sector privado, deben ser más las empresas que se sumen a los programas de combate a la enfermedad.

Se debe pensar entonces en ampliar flancos que permitan llevar a cabo un trabajo más integral y programado para así erradicar el mosquito de manera definitiva.

Esta semana LA REPUBLICA anunció que son más las empresas que están adoptando como suya la responsabilidad de exterminar el dengue en Costa Rica, una tendencia alentadora pero que a la vez compromete a las industrias que siguen el problema de lejos a involucrarse en aportar soluciones al país.