“Solo se es feliz haciendo lo que a uno le gusta”
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Sábado 14 septiembre, 2013
Alberto Padilla
“Solo se es feliz haciendo lo que a uno le gusta”
Renunció a su carrera y estabilidad por vivir sus sueños
“Lo importante es hacer lo que a uno le gusta”
“He cometido muchos errores, pero aprendí de todo”
Reconocido por su cabello canoso, este experimentado presentador mexicano fue una de las imágenes más importantes de CNN en español con su espacio financiero.
Me siento un tipo muy afortunado. Algunas veces he sido pobre otras no tanto, pero siempre contento, indicó Alberto Padilla, presentador. Esteban Monge/La República
Un “accidente” lo llevó a la televisión, donde tuvo la facilidad de leer ante un micrófono gracias a sus clases de teatro en la universidad en Monterrey, su ciudad natal.Renunció al periodismo para lograr un sueño profesional de tener su propio negocio.
Sin embargo, prefirió dejar la comodidad de una vida realizada económicamente para volver a la televisión y ser “pobre”, pero feliz.
Pese a tener malos tratos de jefes y desmotivaciones de quienes le dijeron que no servía como presentador, se convirtió en una referencia de las comunicaciones a nivel latinoamericano.
Tras 25 años de experiencia, actualmente persigue una nueva meta en el canal centroamericano CB24 con sede en Costa Rica, como entrevistador de personas influyentes en la región.
¿Por qué dice que llegó a esta profesión por accidente?
No estudié periodismo, estaba por graduarme en estudios internacionales y necesitaba hacer una práctica profesional.
El único lugar donde encontré espacio fue en el canal de gobierno del estado de Nuevo León, ahí me pidieron que leyera un texto para una prueba de voz en la emisora y les gustó, así que me pusieron a leer noticias.
¿Cómo fue el paso a la televisión?
Como la emisora era parte del canal y estaba en el mismo edificio, me dijeron que necesitaban a una persona que presentara noticias en un programa matutino llamado “Magazine”, tenía 23 años y ya estaba lleno de canas, así que me veía curioso, ahí trabajé un par de años.
¿Encontró su vocación en ese momento?
Lo hacía bien, pero mi mente seguía en otro rumbo, pues quería ser empresario; siempre pensé que esto iba a ser trabajo de un tiempo, solo para no quedarme en mi casa.
¿En ese momento renunció?
En 1992 quería dedicarme a lo mío, puse una negocio de alquiler de celulares en una época donde casi nadie tenía, porque eran muy caros, y fue una idea muy exitosa, llegué a viajar, tenía mi auto, era la envidia de mis amigos por mi éxito, pero no era feliz.
¿Qué le faltaba para sentirse completo?
A pesar de mi éxito advertí en que me faltaba algo y cuando trabajaba en televisión en Monterrey aunque no tenía dinero, era feliz y no sentía ese vacío, así que me di cuenta que necesitaba trabajar en televisión, eso era mi pasión.
¿Cómo logró volver a ese nicho?
Por medio de contactos empecé a preguntar dónde había vacantes y en ese momento TV Azteca estaba recién privatizada y empezaron a buscar personas, así que di el salto a la televisión nacional. Ahí era reportero y presentador.
¿Por qué renunció a su estabilidad en TV Azteca?
Quería irme a trabajar a Estados Unidos y sabía que necesitaba más experiencia detrás de cámaras, saber cómo crear un programa.
Si quería ir a trabajar a otro país requería esa experiencia, así que dejé la televisión nacional, porque me ofrecieron producir un programa financiero en Monterrey, así que me devolví.
¿Cómo lo tomó la gente?
Para muchos fue un salto al vacío, porque ya estaba donde todos querían estar, pero yo sabía que necesitaba esa experiencia, así que me fui contra el consejo de mi padre y de todos.
¿Su carrera fue por suerte?
Me gustaba mucho lo que estaba haciendo, tanto que dejé mi negocio y mi estabilidad económica por vivir esto, mi pareja de ese entonces tuvo que mantenerme, porque no me alcanzaba para nada, así que me sacrifiqué.
¿Alguna vez lo rechazaron?
Tenía una jefa que me dijo: “Tome la oportunidad en Monterrey porque aquí no tiene mucho futuro”. Me hizo saber que no le gustaba mi trabajo, fue duro porque ella tenía mucha experiencia y me sacó de un programa que presentaba porque no di el “kilo”.
¿Cuál característica cree que lo hizo lograr el éxito?
Primero hacer lo que me gusta, insisto en eso, tienes que hacer el trabajo con amor y además tener talento para eso, nunca hubiera podido ser un periodista de prensa escrita, yo no tengo ese talento. Por lo que no he podido escribir un libro.
¿Cómo cumplió su sueño?
Esto es como las mujeres, si una chica me gusta lo intento aunque me rechace, por más que me diga que no, me sigue gustando, lo mismo es con tu profesión o tus metas, las intentas aunque te rechacen.
¿Qué consejo le da a una persona que apenas empieza?
Siempre hacer lo que uno quiere hacer, tienes que hacer lo que te gusta y vas a estar contento. No te garantizo éxito económico, pero vas a ser feliz, eso es el éxito.
¿Cómo se debe escoger una profesión?
La gente se casa con el que escoge, pero trabaja en algo que no quiere aunque pasa más tiempo en la oficina, no tiene lógica. El trabajo tiene que ser como un pasatiempo.
Angie Calvo
acalvo@larepublica.net