Rodrigo Chaves y oposición están en un pulso ajustado por impuestos incluidos en lista gris de la UE

Con un estimado de 41 votos, los diputados de oposición podrían frenar el veto parcial del presidente Rodrigo Chaves en torno a la posibilidad de que en Costa Rica se cobre la renta mundial.

Para ello, todos los diputados del PLN, el PUSC, el Liberal Progresista y Nueva República no pueden ausentarse del plenario, ya que un par de ausencias complicarían la posibilidad de conseguir los 38 votos que se requieren en el plenario para frenar el veto del presidente Chaves.

Los legisladores, al igual que el mandatario, están de acuerdo en avanzar con la normativa que saca a nuestro país de la lista de países no cooperantes en materia tributaria de la Unión Europea (UE).

Sin embargo, se oponen a la posibilidad de que el Ministerio de Hacienda pueda cobrar impuestos a las empresas que están domiciliadas en suelo nacional, pero que obtienen ganancias en el extranjero. Se trata, en la práctica de un nuevo impuesto, conocido como renta mundial.

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“En principio, la oposición suma unos 41 votos para aplicar el resello, pero podría ser que uno o dos diputados de alguna fracción no voten. Para nosotros lo más importante es sacar a Costa Rica de esa lista gris”, dijo Óscar Izquierdo, jefe del PLN.

El verdiblanco manifestó que 18 de los legisladores de su partido sí están a favor de frenar el veto del presidente.

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Mientras tanto, el gobierno insiste en que la propuesta que se aprobó en primero y segundo debate, permitiría a las grandes empresas no pagar impuestos por sus ganancias obtenidas fuera del país.

Esto, se trataría de un nuevo tributo, dijo Daniela Rojas, diputada de la Unidad.

“El Poder Ejecutivo tomó una decisión que pone en riesgo la imagen internacional de Costa Rica. Dichosamente, todavía tenemos tiempo para cambiar esta situación. Esperamos que en el mes de octubre podamos tener claridad sobre este tema. La imagen y la competitividad de Costa Rica están en riesgo, el gobierno quiere aprobar un nuevo impuesto de manera solapada”, dijo Rojas.

Al considerar que el contenido de la propuesta es inconveniente para Costa Rica, el presidente Rodrigo Chaves vetó de manera parcial la ley que saca a Costa Rica de la lista gris de la Unión Europea.

El mandatario señala razones de oportunidad y conveniencia para tomar la decisión, ya que según él, la iniciativa permitiría que grandes empresas con inversiones fuera del país no paguen impuestos.

“Esta reforma implicará una afectación de recursos enormes a la recaudación nacional del Ministerio de Hacienda para beneficiar a pequeños grupos de gente muy acaudalada ¿Por qué algunos diputados accedieron a regalar esos dineros? Yo respeto la separación de poderes y el Estado de Derecho, y lo que voy a hacer es ejercer el derecho al veto parcial para que los diputados puedan reflexionar sobre su decisión y tengan la oportunidad de explicarle al pueblo de Costa Rica por qué toman esa decisión. Al final del día le tocará a ese pueblo emitir los juicios de valor político”, afirmó Chaves.