Ricciardo abrió sus alas

El canguro australiano amenaza seriamente a los grandes}

Daniel Ricciardo, piloto de la escudería Red Bull, dejó en claro que la velocidad y su ritmo semejante al demonio de Tasmania es un mensaje a los dos primeros lugares, Rosberg y Hamilton, sobre su candidatura como nuevo y serio contendiente al título después de ganar el GP de Bélgica, uno de los circuitos más complicados del planeta y colocarse así en la tercera posición de la clasificación de pilotos, a 35 puntos de Hamilton.

El inicio del Gran Premio fue electrizante. La pole no le favoreció en lo absoluto a Nico Rosberg quien se vio damnificado en la salida cuando su compañero de la escudería Mercedes, Hamilton, y el alemán Sebastian Vettel rebasaron al líder.
El capricho de ganar y mantenerse en lo más alto de la clasificación hizo que Rosberg no tardara mucho en recuperar la segunda posición a Vettel y en un intento de adelantar a su compañero Hamilton tocó con la parte derecha de su alerón delantero la rueda trasera izquierda del británico, rompiendo el neumático, lo que obligó a Hamilton a volver a los talleres y continuar desde las últimas posiciones.
Con Hamilton fuera de combate, Rosberg encaraba el liderato en solitario, seguido por los Red Bull de Vettel y Ricciardo, aunque el de Mercedes tenía que parar en torno a la vuelta diez para cambiar el alerón dañado, lo cual le hizo perder muchas posiciones.
Ricciardo regresó a la primera posición, acrecentando su ventaja, cerca de los 14 segundos, Vettel, Raikkonen y Rosberg pararon en torno a la vuelta 22 para poner neumáticos duros, con los que aguantarían hasta el final de la carrera.
Después de las paradas, Ricciardo mantenía su posición en cabecera, seguido por Rosberg, Bottas y Raikkonen. Mientras Rosberg recortaba distancias con Ricciardo, Raikkonen defendía su tercer puesto ante su compatriota Valtteri Bottas.
En uno de los intentos de atacar a Magnussen, que le estaba frenando el ritmo, Alonso se vio superado por Button que venía por detrás, mientras que Vettel aprovechaba también para intentar el adelantamiento.
Aunque Alonso se resistía, finalmente Vettel lo superaba tanto a él como a Magnussen, y entre el danés y el español se colaba Button, que relegaba al bicampeón asturiano al octavo lugar.
Por delante, el Ferrari de Kimi Raikkonen se veía también rebasado por su compatriota Bottas, que lograba en las últimas vueltas su cuarto podio de la temporada.
El que retenía su situación era Ricciardo, que pese a que Rosberg rebajó los 20 segundos que llevaba tras el cambio de neumáticos a tres en la última vuelta, estos fueron suficientes para que el australiano viera la bandera a cuadros en primer lugar y sumara su tercera victoria, segunda consecutiva, amenazando a los Mercedes en la clasificación de pilotos del Mundial de Fórmula Uno.
El domingo 7 de setiembre se correrá el Grand Prix de Italia a falta de siete carreras del final de la temporada 2014.

 

 

Walter Herrera V y EFE
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