Reviviendo el arte del bordado
Melissa González mgonzalezt@larepublica.net | Lunes 06 agosto, 2012
NUEVAS IDEAS
Reviviendo el arte del bordado
Las Bordadoras es una empresa costarricense dedicada a este arte y que con su trabajo beneficia a mujeres de escasos recursos
El bordado es todo un arte en Costa Rica y una tradición, por ello un grupo de mujeres decidió revivirlo.
Se trata de la empresa Las Bordadoras, que actualmente cuenta con cuatro grupos que reúnen a 60 bordadoras en las zonas de Sarchí, Naranjo y Grecia.
La próxima meta es crear cuatro grupos más.
“A través de entidades religiosas y de ayuda social nos acercamos a mujeres de escasos recursos, madres solteras y jefas de familia. Estas mujeres reciben un curso de bordado de cuatro semanas, el cual incluye materiales y equipo de bordado, sin costo alguno”, comentó María del Mar Gómez, gerente de la organización.
Quienes concluyen el curso son invitadas a ser parte de la empresa, donde reciben un salario y tienen beneficios como trabajar desde la casa y con horarios flexibles.
“Los diseños que bordamos son completamente originales, inspirados en elementos tradicionales costarricenses. La línea Sarchí, que es la más desarrollada hasta el momento, utiliza elementos gráficos de la carreta típica costarricense, pero desde un punto de vista nuevo, combinando lo mejor de nuestra tradición con una estética del siglo XXI”, comentó.
La empresa además destaca por trabajar con un enfoque amigable con el medio ambiente, con esfuerzos dirigidos a minimizar los desechos y reducir nuestra huella carbónica e hídrica.
Cuentan además con una línea de monederos y cosmetiqueras fabricados con telas recicladas o de desecho, entre otros materiales.
Melissa González
mgonzalezt@larepublica.net
Reviviendo el arte del bordado
Las Bordadoras es una empresa costarricense dedicada a este arte y que con su trabajo beneficia a mujeres de escasos recursos
Se trata de la empresa Las Bordadoras, que actualmente cuenta con cuatro grupos que reúnen a 60 bordadoras en las zonas de Sarchí, Naranjo y Grecia.
La próxima meta es crear cuatro grupos más.
“A través de entidades religiosas y de ayuda social nos acercamos a mujeres de escasos recursos, madres solteras y jefas de familia. Estas mujeres reciben un curso de bordado de cuatro semanas, el cual incluye materiales y equipo de bordado, sin costo alguno”, comentó María del Mar Gómez, gerente de la organización.
Quienes concluyen el curso son invitadas a ser parte de la empresa, donde reciben un salario y tienen beneficios como trabajar desde la casa y con horarios flexibles.
“Los diseños que bordamos son completamente originales, inspirados en elementos tradicionales costarricenses. La línea Sarchí, que es la más desarrollada hasta el momento, utiliza elementos gráficos de la carreta típica costarricense, pero desde un punto de vista nuevo, combinando lo mejor de nuestra tradición con una estética del siglo XXI”, comentó.
La empresa además destaca por trabajar con un enfoque amigable con el medio ambiente, con esfuerzos dirigidos a minimizar los desechos y reducir nuestra huella carbónica e hídrica.
Cuentan además con una línea de monederos y cosmetiqueras fabricados con telas recicladas o de desecho, entre otros materiales.
Melissa González
mgonzalezt@larepublica.net