Puerto La Unión listo para operar
| Jueves 22 enero, 2009
Puerto La Unión listo para operar
San Salvador
EFE
La empresa constructora Toa Corporation-Jan De Nul, de capital japonés y belga, entregó ayer al Gobierno de El Salvador el puerto de La Unión, obra con la que se pretende convertir la zona este del país en un centro logístico regional.
El puerto, construido desde mayo de 2005 en el departamento de La Unión, unos 183 kilómetros al sureste de San Salvador, es considerado el más emblemático proyecto nacional de las últimas décadas.
Ubicado en el Golfo de Fonseca, cuyas aguas son compartidas con Honduras y Nicaragua, las instalaciones incluyen un moderno muelle con capacidad para el anclaje de barcos grandes, así como otras obras civiles en una extensión de 117 hectáreas.
La empresa entregó la obra al presidente salvadoreño, Elías Antonio Saca, quien también ordenó para ayer la entrega a la Asamblea Legislativa de un proyecto de Ley sobre la concesión de este puerto y el de Acajutla, único que por décadas ha funcionado para el desembarque de mercaderías.
El proyecto, preparado por una comisión que dirigió la vicepresidenta, Ana Vilma de Escobar, propone una inversión del 90% para el funcionamiento del puerto por parte de la compañía internacional que gane la licitación y un 10% de parte del Gobierno, en calidad de ente controlador.
Saca dijo en su discurso durante el acto que es una obra “de grandes proporciones que nos trae oportunidades” ya que “será uno de los pocos puertos en el Pacífico que tiene un calado profundo capaz de recibir embarcaciones grandes”.
Agregó que la construcción “abre una singular puerta marítima a Centroamérica, una puerta que le da a El Salvador una ventaja competitiva”.
Saca afirmó que el Gobierno apuesta “convertir a toda esta región del oriente (del país) en un centro de distribución regional capaz de solventar necesidades de logística y servicios para el resto de países centroamericanos y para el norte del continente americano”.
El mandatario sostuvo que a nivel mundial se experimentan cambios en el transporte marítimo y Centroamérica se “ubica en una posición privilegiada, justo en el centro de las rutas marítimas del Pacífico”.
Agregó que además de “atraer barcos”, el puerto es un “símbolo de la unión Centroamericana” que atraerá turistas y la inversión de nuevas empresas a la zona.
El Puerto, consideró Saca, es un “icono nacional” y un “símbolo del renacer de El Salvador a la modernidad” y del “progreso de un país” que se recupera “del estancamiento y la destrucción” que dejó el conflicto armado (1980-1992).
Este puerto se construyó con una inversión de más de $160 millones, 107 de ellos financiados con un préstamo a bajos intereses otorgado por Japón.
San Salvador
EFE
La empresa constructora Toa Corporation-Jan De Nul, de capital japonés y belga, entregó ayer al Gobierno de El Salvador el puerto de La Unión, obra con la que se pretende convertir la zona este del país en un centro logístico regional.
El puerto, construido desde mayo de 2005 en el departamento de La Unión, unos 183 kilómetros al sureste de San Salvador, es considerado el más emblemático proyecto nacional de las últimas décadas.
Ubicado en el Golfo de Fonseca, cuyas aguas son compartidas con Honduras y Nicaragua, las instalaciones incluyen un moderno muelle con capacidad para el anclaje de barcos grandes, así como otras obras civiles en una extensión de 117 hectáreas.
La empresa entregó la obra al presidente salvadoreño, Elías Antonio Saca, quien también ordenó para ayer la entrega a la Asamblea Legislativa de un proyecto de Ley sobre la concesión de este puerto y el de Acajutla, único que por décadas ha funcionado para el desembarque de mercaderías.
El proyecto, preparado por una comisión que dirigió la vicepresidenta, Ana Vilma de Escobar, propone una inversión del 90% para el funcionamiento del puerto por parte de la compañía internacional que gane la licitación y un 10% de parte del Gobierno, en calidad de ente controlador.
Saca dijo en su discurso durante el acto que es una obra “de grandes proporciones que nos trae oportunidades” ya que “será uno de los pocos puertos en el Pacífico que tiene un calado profundo capaz de recibir embarcaciones grandes”.
Agregó que la construcción “abre una singular puerta marítima a Centroamérica, una puerta que le da a El Salvador una ventaja competitiva”.
Saca afirmó que el Gobierno apuesta “convertir a toda esta región del oriente (del país) en un centro de distribución regional capaz de solventar necesidades de logística y servicios para el resto de países centroamericanos y para el norte del continente americano”.
El mandatario sostuvo que a nivel mundial se experimentan cambios en el transporte marítimo y Centroamérica se “ubica en una posición privilegiada, justo en el centro de las rutas marítimas del Pacífico”.
Agregó que además de “atraer barcos”, el puerto es un “símbolo de la unión Centroamericana” que atraerá turistas y la inversión de nuevas empresas a la zona.
El Puerto, consideró Saca, es un “icono nacional” y un “símbolo del renacer de El Salvador a la modernidad” y del “progreso de un país” que se recupera “del estancamiento y la destrucción” que dejó el conflicto armado (1980-1992).
Este puerto se construyó con una inversión de más de $160 millones, 107 de ellos financiados con un préstamo a bajos intereses otorgado por Japón.