País solicita repatriación de piezas arqueológicas
Carolina Barrantes redaccion@larepublica.net | Sábado 03 mayo, 2008
País solicita repatriación de piezas arqueológicas
Unas 457 obras forman parte de un lote de 1.800 piezas que fue decomisado en Alemania en abril. El valor de la colección ronda los $100 millones
Carolina Barrantes
cbarrantes@larepublica.net
Autoridades culturales y diplomáticas nacionales impulsan medidas judiciales para recuperar 457 piezas arqueológicas que pertenecerían al país, y que forman parte de un lote de 1.800 objetos que fueron decomisados en Alemania hace casi dos semanas.
El anuncio fue dado a conocer por autoridades del Ministerio de Cultura y Juventud en un comunicado el viernes, en el que además se señala que la medida cuenta con el respaldo de la Interpol (Policía Internacional), y las embajadas de Costa Rica en Alemania y España, país donde se exhibieron las obras por última vez en 1997.
La colección aparentemente pertenecería a un costarricense radicado en Europa, de apellido Patterson.
En esta habría además piezas de cerámica, piedra, oro y jade de otros países latinoamericanos como México, Guatemala y Perú.
Para reclamar las obras, el Museo Nacional envió el martes un documento en el que responde una serie de preguntas planteadas por las autoridades alemanas. También aportó la legislación que tiene el país al respecto y una lista con la descripción y fotografías de las piezas.
En el comunicado, las autoridades de cultura señalaron que “por disposición legal, los objetos arqueológicos de la época precolombina constituyen patrimonio nacional arqueológico, propiedad del Estado y su exportación está prohibida”.
El problema con las piezas se remonta al 30 de agosto del año anterior, cuando la Interpol envió al Museo Nacional una lista fotográfica de un lote de obras que estaban en Santiago de Compostela.
El 1° de octubre de ese mismo año, el Ministerio de Cultura interpuso una denuncia ante el Organismo de Investigación Judicial cuando se comprobó que algunas de las piezas eran costarricenses, y el 5 de noviembre el Museo envió una carta al canciller Bruno Stagno para que interviniera.
La colección, cuyo valor ronda los $100 millones, estuvo encerrada en un almacén durante cerca de 11 años, hasta que Patterson habría solicitado el traslado de la mayor parte de las obras hacia otro país.
El cargamento fue incautado el 21 de abril anterior, por la aduana de Múnich, y se mantiene en un contenedor custodiado por la justicia de ese país.
Unas 457 obras forman parte de un lote de 1.800 piezas que fue decomisado en Alemania en abril. El valor de la colección ronda los $100 millones
Carolina Barrantes
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Autoridades culturales y diplomáticas nacionales impulsan medidas judiciales para recuperar 457 piezas arqueológicas que pertenecerían al país, y que forman parte de un lote de 1.800 objetos que fueron decomisados en Alemania hace casi dos semanas.
El anuncio fue dado a conocer por autoridades del Ministerio de Cultura y Juventud en un comunicado el viernes, en el que además se señala que la medida cuenta con el respaldo de la Interpol (Policía Internacional), y las embajadas de Costa Rica en Alemania y España, país donde se exhibieron las obras por última vez en 1997.
La colección aparentemente pertenecería a un costarricense radicado en Europa, de apellido Patterson.
En esta habría además piezas de cerámica, piedra, oro y jade de otros países latinoamericanos como México, Guatemala y Perú.
Para reclamar las obras, el Museo Nacional envió el martes un documento en el que responde una serie de preguntas planteadas por las autoridades alemanas. También aportó la legislación que tiene el país al respecto y una lista con la descripción y fotografías de las piezas.
En el comunicado, las autoridades de cultura señalaron que “por disposición legal, los objetos arqueológicos de la época precolombina constituyen patrimonio nacional arqueológico, propiedad del Estado y su exportación está prohibida”.
El problema con las piezas se remonta al 30 de agosto del año anterior, cuando la Interpol envió al Museo Nacional una lista fotográfica de un lote de obras que estaban en Santiago de Compostela.
El 1° de octubre de ese mismo año, el Ministerio de Cultura interpuso una denuncia ante el Organismo de Investigación Judicial cuando se comprobó que algunas de las piezas eran costarricenses, y el 5 de noviembre el Museo envió una carta al canciller Bruno Stagno para que interviniera.
La colección, cuyo valor ronda los $100 millones, estuvo encerrada en un almacén durante cerca de 11 años, hasta que Patterson habría solicitado el traslado de la mayor parte de las obras hacia otro país.
El cargamento fue incautado el 21 de abril anterior, por la aduana de Múnich, y se mantiene en un contenedor custodiado por la justicia de ese país.