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COLUMNISTAS


Los eurobonos

Emilio Bruce ebjreproduccion@gmail.com | Viernes 25 noviembre, 2022


Sinceramente

Se alcanzó un acuerdo entre el Poder Ejecutivo y la Asamblea Legislativa para aprobar un empréstito por 5.000 millones de Euros. El Poder Ejecutivo deseaba que el mismo fuera por 6.000 millones. La Asamblea Legislativa no objetó la necesidad que el país tiene de los eurobonos. Tampoco objetó suministrar al Poder Ejecutivo recursos suficientes para evitar un incumplimiento de sus obligaciones con los tenedores de bonos costarricenses. Aparentemente los diputados no buscaron dañar a la administración presente sino favorecer los intereses de Costa Rica.

La Asamblea Legislativa buscó en todo momento cuidar no endeudar más al país. Ya la deuda pública es peligrosamente alta. La Asamblea Legislativa buscó suministrar los recursos justos para refinanciar las deudas sin aumentar el endeudamiento. Ésta buscó determinar los vencimientos de las deudas para que los recursos estuvieran prestos a pagar las obligaciones de país.

La Asamblea redujo las pretensiones del empréstito de 6.000 millones de euros solicitados por el Poder Ejecutivo a unos 5.000 millones de euros. El Euro ha estado cotizándose muy bajo, inclusive en algunos momentos ha estado más bajo que la Libra Esterlina y que el Dólar de Estados Unidos. Si en el tiempo el euro se llegara a apreciar el país vería crecer sus obligaciones en colones costarricenses sin haber tomado más préstamos que los necesarios.

El combate a la inflación por parte del Banco de Inglaterra, del Federal Reserve Bank y del Banco Central Europeo ha hecho que las tasas presentes de interés sean muy altas. A futuro podrían ser menores cuando para combatir la recesión económica los bancos centrales que hoy las subieron las bajen entonces. De allí todas las consideraciones que los diputados han dado a este empréstito.

Ya ha habido acuerdo entre Poder Ejecutivo y Asamblea Legislativa y serán aprobados 5.000 millones que permitirán pagar vencimientos y además impedir la carrera alcista del tipo de cambio del colón costarricense.

En democracia la imposición y el autoritarismo siempre ceden paso a la negociación. Ésta no puede ni debe de ser corrupta. Ofrecer embajadas, puestos en las directivas bancarias u otras prebendas por los votos habla muy mal de quiénes pudieran haberlas ofrecido y de quiénes pudieran haberlas aceptado. Estos viejos vicios que los costarricenses deseamos acabar, pareciera que volvían a renacer.

La negociación de una oposición constructiva con un Poder Ejecutivo respetuoso lleva con facilidad a acuerdos que sirven a los más altos intereses del país. El diálogo, la negociación, los ajustes para transformar en posible lo que parecía imposible lograron el resultado positivo que hoy observa el país en satisfacción.

Los pleitos permanentes no solucionan los problemas, los acuerdos y negociaciones sí lo logran. Las buenas relaciones acercan a las personas a resolver los problemas de país. Siempre se trabaja mejor cuando una de las partes no irrespeta a la otra.

El acuerdo sobre los 5.000 millones de euros ha puesto de manifiesto el funcionamiento de una democracia deliberante y el error de gestos, palabras y actitudes destempladas de parte de algunos. Fueron dos poderes colegisladores, en el corazón de nuestra institucionalidad, los que sirvieron a los intereses de Costa Rica.

Esperamos todos que esta lección en democracia, negociación, ajuste e intercambio sirva para los próximos proyectos a aprobar y que la experiencia desarrollada facilite y abrevie los siguientes que se presenten para su aprobación ante la Asamblea Legislativa.

Se ha mostrado en este proceso la ruta clara del país para el futuro. Los poderes ejecutivo y legislativos fueron exitosos en su diálogo y acuerdo y la institucionalidad funcionó.

¡Felicidades Costa Rica! La división de poderes funciona, la constitución se sigue, las leyes se aprueban, los problemas se enfrentan y entre todos se solucionan como debe de ser. El respeto entre las partes siempre es constructivo y pavimenta el camino de las mejores relaciones entre los actores.

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